Hace poco tiempo hablábamos en Bebes y más de una patología que, desde hace un tiempo, parece estar muy de moda entre los niños que son un tanto inquietos y que, por tanto, hace que se pregunten las madres y los padres si tiene mi hijo Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH).
Hoy veremos las posibles causas del TDAH en niños y niñas, aunque la naturaleza de este trastorno sigue sin estar actualmente del todo claro. Es cierto que conocemos algunos de los factores principales que predisponen a la aparición de esta trastorno, así como diferentes factores protectores, pero no su origen exacto.
Comprobemos entonces cuáles son esos factores que influyen y favorecen la aparición del TDAH y cuáles son aquellos que impiden que éste se desarrolle en su totalidad.
Factores que protegen de la aparición del TDAH
Podemos hablar principalmente de cuatro factores protectores que son: mayor nivel educativo de los padres, mejor salud en general del pequeño, mayores habilidades cognitivas (especialmente relacionadas con el lenguaje) de éste y una mayor estabilidad familiar.
El conjunto de estos factores pueden facilitar que sea más difícil la aparición de un trastorno de este tipo, aunque no quiere decir que sea la panacea final para que no aparezcan síntomas relacionados con TDAH.
Factores que predisponen la aparición del TDAH
Obviamente, entre los factores que predisponen la aparición del TDAH, el principal es la existencia de antecedentes familiares del trastorno. También nos podemos encontrar con otros factores como el consumo de alcohol, tabaco u otras drogas, junto a una alimentación deficitaria de la madre durante el embarazo, bajo peso del niño al nacer, bajo nivel cultural en general de los padres, mala salud o retrasos en el desarrollo del bebé…
Gracias a los avances de la ciencia de los últimos tiempos, se está apoyando más la idea de que hay una relación entre el TDAH y los aspectos neurobiológicos del niño en la aparición del trastorno. Por ejemplo, existen distintas investigaciones que han logrado identificar alteraciones en el gen transportador de la dopamina, el cuál está relacionado con la impulsividad, y el gen receptor de la dopamina, relacionado con la atención.
No obstante, hay que tener en cuenta que existen múltiples causas que pueden llevar al desarrollo y al mantenimiento de los síntomas del TDAH, por lo que es muy importante ver las características del niño y del ambiente en el que se desenvuelve como un conjunto, no como aspectos separados.
Indicadores de riesgo en la primera infancia
Podemos señalar, de forma breve, diferentes indicadores de riesgo en la primera infancia. Por ejemplo, un niño será más susceptible al TDAH cuando su vida familiar está ausente de control razonable o tiene una carga importante de tensión emocional. Por otro lado, esta predisposición puede verse disminuida por factores que actúen en dirección positiva, como el afecto y apoyo maternal y paternal.
Uno de los indicadores de riesgo más importantes y a los que hay que prestar especial atención es el clima familiar y crianza de los niños. El patrón de comportamiento característico de los niños con TDAH en la primera infancia puede generar sentimientos de ineficacia personal, estrés, frustración, enojo y rechazo.
Todos estos sentimientos negativos, que influyen en la intereacción madre-padre-hijo, hacen que se suelan aplicar pautas de disciplina que bien son excesivamente permisivas o, por el contrario, extremadamente autoritarias. Como consecuencia a esto, los problemas de relación que se generar en estos momentos tienen un fuerte impacto negativo sobre el correcto desarrollo del niño.
Las características temperamentales de los niños con TDAH suelen verse relacionadas, principalmente, con un temperamento que dificulta su crianza,. Éste se presenta en forma de poca adaptación a las situaciones nuevas, mal humor o dificultad para adaptarse a las rutinas.
También suelen ser niños con un exceso de actividad, que reaccionaban de forma desproporcionada ante los estímulos del ambiente, se mostraban irritables y demandaban su atención continua.
No obstante hablaremos más adelante, y de forma más detallada, de las manifestaciones del TDAH en niños pequeños, con el fin de intentar aclarar cómo podemos identificar a un niño con este tipo de trastorno.
Como podéis ver, las posibles causas del TDAH en niños y niñas aún no están del todo claras, y es necesario seguir investigando para poder determinar con claridad qué es lo que origina este tipo de trastorno que, desafortunadamente, cada vez se emplea más a la ligera sin tener en cuenta las consecuencias que puede llevar este tipo de etiquetas.
Foto | devinf en Flickr
En Bebés y más| ¿El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad es una enfermedad?, “No estáis solos”, testimonio sobre el déficit de atención e hiperactividad.