¿Eres de esas personas a las que el desorden les causa estrés? No eres un bicho raro. Por el contrario, está científicamente comprobado que tener la casa patas arriba, los juguetes tirados por el suelo y una pila de platos sucios en el fregadero genera ansiedad en algunas personas. Y aunque no suele ser considerada una fuente de estrés, las casas y los espacios de trabajo desordenados provocan ansiedad, y nos hacen sentir impotentes y abrumados.
El desorden puede jugar un papel importante en cómo nos sentimos con respecto a nuestros hogares, a nuestros lugares de trabajo y a nosotros mismos. Pero cuando hay niños en casa, el orden puede parecernos una irrealidad imposible de alcanzar. Tampoco hay que obsesionarse, ya que los niños son niños, pero os damos algunas claves que os ayudarán a mantener el orden en una casa con niños.
¿Por qué el desorden nos estresa?
Me siento tan identificada con esta idea de que el desorden genera ansiedad que es como decir "al fin alguien me entiende". ¿A vosotros también os pasa? Estas son algunas de las razones por las que nos estresa tenerlo todo fuera de sitio.
- Nos abruma el caos del exceso de estímulos.
- No sabemos por dónde empezar a recoger.
- Nos distrae de otras cosas en las que nos gustaría enfocarnos.
- Nos impide relajarnos y disfrutar; siempre hay algo que ordenar.
- Nos da la sensación de que el trabajo en casa nunca se termina.
- Nos impide ser creativos y productivos.
- Nos impide encontrar lo que necesitamos, y esto nos hace perder tiempo y en ocasiones, también dinero.
Afecta más a las mujeres
Según una investigación realizada por el Centro de Vida y Familias de UCLA sobre los comportamientos de las familias, a las mujeres nos afecta el desorden más que a los hombres.
Entre sus conclusiones, hallaron que las mujeres en hogares desordenados tienen niveles más altos de cortisol, conocida como la hormona del estrés.
Trucos para mantener el orden en casa
Que todos ayuden
Hacer partícipes del orden y la limpieza a todos los miembros de la familia, incluidos los más pequeños, es una excelente medida para poner en práctica desde hoy mismo. Puedes confeccionar un organigrama semanal con las tareas de las que tiene que ocuparse cada uno. Habrá que tener paciencia con los más pequeños, pero si somos constantes, con el tiempo les ayudará a sentirán autónomos e independientes.
Crea espacios de almacenaje
Procura que cada cosa tenga un sitio donde pueda guardarse. Búscales a los juguetes un sitio apropiado de acuerdo a las edades de tus hijos. Por ejemplo, si tienes niños de diferentes edades, guarda en alto los juguetes de los mayores que puedan contener piezas pequeñas o pilas peligrosas para los más pequeños.
Puedes incluso rotular los espacios para que los niños sepan dónde va cada cosa, y así será más fácil para ellos mantenerlo todo en orden. Y no hablamos solo de juguetes, sino de la ropa, los artículos de cocina... Es importante involucrar a los niños en el orden general de la casa.
Recoger después de jugar, limpiar después de ensuciar
Es importante enseñarles desde pequeños a que recojan sus juguetes después de jugar, los pinceles después de pintar o limpiar si ensucian. Si somos consecuentes y constantes acabarán incorporándolo como rutina y esto, con el tiempo, ayudará a mantener la casa en orden.
Hay que tener mucha paciencia y evitar los enfados, ya que si gritamos y les regañamos por no recoger acabarán viéndolo como un castigo. Debe ser algo que incorporen naturalmente como parte de la rutina cotidiana.
Reduce la cantidad de juguetes y objetos
Cuantos menos juguetes, menos cosas que recoger. Al final los niños no necesitan tantos juguetes; tener demasiados juguetes los sobreestimula, no les permite ser creativos y acaban por no valorar lo que tienen.
Así que, apúntate al minimalismo, reduce la cantidad de juguetes, así como la cantidad de objetos que tienes en casa y verás como se simplifica tu vida.
Relájate
Por último, un consejo que sé que cuesta si sufres con el desorden, pero también es importante tener en cuenta. Tener la casa impecable con niños pequeños es prácticamente una utopía, así que haz "la vista gorda" de vez en cuando y disfruta del precioso caos en el que vivimos los padres y piensa que no serán niños toda la vida. Aprovecha ahora que son pequeños porque serán niños solo una vez.
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