A mí este asiento siempre me ha parecido muy práctico, especialmente para la etapa en que los bebés todavía no saben sentarse solitos pues es muy beneficiosos para el desarrollo de su columna vertebral. No sólo a mí me ha gustado sino a dos millones de padres de todo el mundo que lo han comprado, la mitad sólo en los Estados Unidos.
Pero ayer la Comisión de Seguridad de Productos para el Consumidor de ese país anunció la retirada en colaboración con el fabricante de un millón de asientos Bumbo Easy Seats ante 28 reportes de accidentes por caídas de bebés de superficies elevadas con consecuencias de golpes, algunos bastante graves.
El asiento Bumbo advierte en su manual que sólo debe ser colocado a nivel de suelo, porque no tiene cinturón de seguridad y lógicamente si sentamos al bebé en el asiento en una superficie elevada como una mesa, un sofá o una cama es muy posible que el bebé se mueva y se caiga.
Literalmente dice (aunque en inglés): "Fue diseñado para ser usado al nivel del suelo únicamente. Nunca deje a su bebé desatendido, este asiento no está diseñado para restringir movimientos y por lo tanto su bebé puede escaparse en caso de un movimiento fuerte".
De todas formas, en el suelo no es recomendable dejar al bebé solo sin vigilancia, tiene que estar siempre bajo la supervisión de un adulto.
En España también se ha vendido bastante, así que si tienes uno en casa sigue las recomendaciones del fabricante para evitar accidentes. El producto en sí no es peligroso, pero si se hace mal uso de él como sucede con tantos otros artículos ponemos en riesgo al bebé.
Vía | La Opinión digital En Bebés y más | Bumbo