Es necesario aleccionar sobre la importancia de seguir las indicaciones que los pediatras realizan, ya que de otro modo pueden presentarse distintas alergias o intolerancias alimenticias con las consiguientes consecuencias. El sistema digestivo de los bebés está en pleno proceso de maduración y no es bueno intentar adelantar acontecimientos y proporcionarle al pequeño alimentos a destiempo. A partir del cuarto mes la leche no cubre todas las necesidades del bebé y es cuando empiezan a introducirse los alimentos apropiados para complementar su dieta. Esta introducción siempre debe realizarse mediante pequeñas cantidades y espaciadas al menos 24 o 48 horas. Esta incorporación progresiva permite al bebé asimilar adecuadamente los alimentos.
A modo recordatorio, primeramente se introducen los cereales sin gluten, seguidamente los zumos y frutas, después verduras y carnes suaves, pastas, legumbres y finalmente el pescado. En cuanto a los embutidos, es recomendable el jamón dulce.
Volvemos a hacer énfasis en la importancia de seguir las recomendaciones de los especialistas y pediatras para un adecuado desarrollo del pequeño sin que sufra ningún tipo de contratiempo alimentario.
Vía | La Voz de Galicia Más información | COFC