Cada vez estoy más segura de que son los niños los que vienen a darnos grandes lecciones de vida y no nosotros a ellos. Desde actos de bondad y empatía, hasta grandes muestras de fortaleza, los hijos vienen a demostrarnos que existe una manera más positiva de ver el mundo.
Ahora, una pequeña de siete años que padece alopecia, nos da una increíble muestra de que la belleza emana de nuestra personalidad y no de nuestra apariencia, así como la importancia de reforzar la autoestima desde pequeños.
Gianessa es una niña de siete años con una hermosa sonrisa y una actitud muy alegre. A principios de año su madre, Daniella Wride notó que Gianessa tenía una pequeña zona de su cabeza sin cabello.
Preocupada, la llevó al medico, quien le dijo que padecía alopecia, una enfermedad autoinmune que se caracteriza por la pérdida del cabello. En tan solo tres semanas, Gianessa fue quedándose sin cabello, hasta que su cabeza quedó completamente calva, sin embargo, ella continúa con una sonrisa en su rostro.
Un par de meses después, se acercaba una fecha especial para Gianessa en su escuela, el "Día del Cabello Loco", en el que los estudiantes se peinan de maneras divertidas y extravagantes y gana el que lleve el peinado más original. Un año antes, su madre había convertido su cabello en un colorido cuerno de unicornio.
Con la fecha en puerta, Daniella comenzó a preocuparse pues temía que su hija se pusiera triste por no poder participar debido a su condición, así que pensó en las opciones que tendría para hacerle algo divertido a su hija.
Decidió ir de compras y en la sección de manualidades encontró un paquete de pegatinas que parecen piedras preciosas y le pareció que los colores brillantes y sus diseño divertidos irían perfecto con la personalidad de Gianessa.
En entrevista para el Huffington Post, Daniella comenta que al principio Gianessa no estaba muy segura de la idea porque no sabía si a sus compañeros de clase les iba a gustar. Pero una vez que vio en el espejo el resultado del trabajo de su madre, Gianessa no podía contener la emoción.
¿Y cómo no estar emocionada? Los diseños que había elegido su madre eran muy lindos: un búho, una mariposa y muchas flores coloridas que decoraban su cabeza.
Cuando Gianessa llegó a la escuela, sus compañeros de inmediato se vieron fascinados con los adornos en su cabeza, tanto así que algunos incluso le dijeron que deseaban poder hacer ellos algo así. Al volver Gianessa de clases, le contó a su madre que todos habían amado su "cabello loco".
Sin duda este es el ejemplo de una madre que ha sabido manejar de una manera positiva una situación que podría haberse convertido en motivo de tristeza para su hija. También Gianessa se lleva el crédito, pues además de que los niños tienden a verle el lado positivo a las cosas, su personalidad alegre la hace aún más bella y segura de sí misma.
Creo que este es un buen ejemplo de lo importante que es hablar de belleza con nuestras hijas antes de que la industria de la belleza lo haga. El reafirmarle a su hija que es hermosa con o sin cabello, definitivamente ayuda mucho. ¿Y sobre el concurso? Bueno, Gianessa lo ganó.
Daniella está muy contenta e impresionada con lo bien que las personas han tomado la actitud de su hija, agradeciéndole a todos por sus mensajes de apoyo y animando a las personas que también padezcan alopecia a que usen lo que para ellos les sea más cómodo y que lo lleven siempre con orgullo.
Vía | Huffington Post
Fotos | Daniella Wride (reproducidas con autorización)
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