Os he traído las ‘seis razones para utilizar juegos de mesa’ de Malena Martín (responsable de Aprendiendo matemáticas), y lo hecho porque en casa nos gusta muchísimo este tipo de entretenimiento. Al igual que Malena siempre les he ‘otorgado’ cualidades más allá de ‘pasar una tarde larga de domingo’.
Me gusta mucho la manera en la que mis hijos aprenden a pensar y buscan soluciones o estrategias mientras juegan al Monopoly, la batalla naval o el Catán. También me sorprendo por la capacidad por atraer la atención que tienen (es el caso del Tangram en mi casa), sin duda estos juegos pueden convertir en productivo el tiempo de ocio de la forma más sencilla. Malena nos recomienda que hagamos una pequeña colección de juegos de mesa para pasar algunos de los momentos de calor que nos esperan, o algunas de las horas del atardecer… cuando los niños ya están más que ‘hartos’ (es un decir claro) de corretear al aire libre con sus amigos. Los niños aprenden jugando, eso ya lo sabemos todos, y nosotros sólo les tenemos que proporcionar las oportunidades y nuestra compañía.
¿Queréis saber cuáles son las seis razones para utilizar juegos de mesa?
1.- Trabajan la comprensión de todo tipo de conceptos matemáticos. Desde el juego más sencillo como el parchís hasta maravillosos juegos de lógica o geometría, los niños pueden ayudarse de los juegos para comprender mejor todo tipo de conceptos matemáticos.
2. Favorecen la adquisición de métodos de resolución de problemas. Esto es especialmente significativo en los juegos de estrategia. Infinidad de veces oímos como los niños no saben resolver problemas pero pocas veces nos planteamos si creamos situaciones donde tengan que elaborar estrategia y libremente puedan probar y probar.
3. Crean ambientes que incitan a pensar matemáticamente. Con los juegos de mesa se crean situaciones que incitan a pensar matemáticamente. Puede ser llegar al final de un circuito o pensar cómo disponer las piezas en un puzle, pero siempre hay una situación que requiere de un pensamiento de tipo lógico-matemático.
4. Aumentan la capacidad de los niños de ayudarse entre ellos. Fomentan el espíritu de equipo. Tanto sean juegos que implique hacer equipos como juegos que se jueguen individualmente, los niños piensan en voz alta y echan un cable a aquel que está en apuros. Son ese tipo de ayudas sin intervención adulta, entre pares, aquellas que “realmente" sirven.
5. Ayudan a identificar errores y dificultades y los niños a medida que practican un juego van disminuyendo las equivocaciones. Los niños llevan al límite sus capacidades, corrigen sus errores y piden más y más. No subestimemos el trabajo que realizan los niños al jugar.
6. Propician el debate y la búsqueda de mejores estrategias. Delante de errores, dudas y dificultades aparecen, con el tiempo, diálogos más largos y complejos, para llegar a soluciones efectivas y compartidas.
No le deis más vueltas: ahora todos tendremos más tiempo libre y los juegos de mesa son una buena opción para divertirnos y aprender… por si fuera poco la inversión no deja de ser económica. Y es que no siempre es necesario comprar el último juego del mercado, porque puede ser suficiente revisar armarios, imprimir tableros, o buscar sitios donde tengan ofertas, como es el caso de Zacatrus.
Imagen | garlandcannon Fuente | Aprendiendo Matemáticas En Peques y Más | Nuevas ideas y recursos interesantes con Aprendiendo Matemáticas, La tienda de Aprendiendo Matemáticas nos ofrece propuestas para trabajar con los niños de una forma vivencial y manipulativa