Al utilizar piezas de solomillo de cerdo y no carne picada, la única dificultad reside en picar en trozos pequeños la carne, que luego mezclaremos con hortalizas salteadas, para animar a los niños a su consumo.
A cambio, en lugar del puré de patatas utilizaremos patatas cortadas en rodajas muy finas que se cocinarán directamente en el horno, por lo que la receta no nos llevará demasiado tiempo y seguro que servirá para ayudar a todos los miembros de la casa a comer más hortalizas.
Ingredientes para 6 personas
- 2 patatas grandes, 2 solomillos de cerdo, 1 calabacín, 1 pimiento verde, 1 puerro, 3 zanahorias, 2 tomates maduros, 3 cucharadas de tomate frito, sal y cebolla frita crujiente para rematar
Cómo hacer pastel de solomillo de cerdo con patatas panadera
Comenzamos troceando la carne del solomillo de cerdo ibérico y la salteamos ligeramente salpimentada en una sartén. Reservamos. Mientras se hace la carne, picamos las hortalizas en trozos pequeños y los pochamos en tres cucharadas de aceite de oliva, removiendo hasta que se vayan ablandando.
Incorporamos el tomate frito y dejamos que esa salsa se cocine durante 15 minutos, removiendo de vez en cuando hasta obtener una especie de pisto con las verduras ligeramente al dente. Incorporamos entonces la carne y mezclamos bien.
En una fuente apta para el horno engrasada con mantequilla o aceite de oliva, ponemos una capa de rodajas de patata cortadas muy finas con una mandolina o un cuchillo afilado. Sobre ella ponemos el relleno de carne y verduras y cubrimos con otra capa de patatas procurando que queden acabalgadas cada una sobre la anterior como se ve en la imagen de portada.
Barnizamos las patatas con aceite de oliva, decoramos con dos líneas de cebolla crujiente y metemos al horno donde cocinamos a 200º durante unos treinta minutos hasta que las patatas estén doradas y en su punto. Servimos en la misma fuente.
Tiempo de elaboración | 45 minutos
Dificultad | Media
Degustación
Este pastel de solomillo de cerdo con patatas panadera cunde mucho por lo que podrá daros para comer un par de días. Podéis guardar las sobras en la nevera y calentarlas en el microondas cuando queráis repetir la experiencia.
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