Los bebés desde que nacen van aumentando poco a poco sus capacidades motoras, hasta que adquieren cierta autonomía gateando y caminando. Existen muchos ejercicios fisicos que ayudan al bebé a desarrollar esa autonomía y madurez en muchos sentidos.
Pero cuando hablamos de bebés que hacen ejercicio no nos referimos a una tabla de movimientos o a gimnasios para bebés. Me refiero fundamentalmente a jugar, a moverse con el bebé, ayudándose en ocasiones de elementos como pelotas, muñecos...
Ya habrá tiempo de practicar un deporte. De momento, nos quedamos con el aspecto más lúdico del ejercicio (que tampoco ha de olvidarse más adelante).
Las habilidades que desarrollan los bebés haciendo ejercicio son múltiples, habilidades necesarias para un adecuado desarrollo. Aquí os dejamos una muestra para que os animéis a favorecerlas con vuestros hijos.
Desarrollo del equilibrio con la función vestibular: el sistema del oído interno indica hacia dónde se mueve el bebé, la dirección de los sonidos...
Desarrollo de la audición, diferenciando sonidos (por ejemplo con juguetes musicales) y voces al estar junto a los papás u otros niños, lo cual nos lleva al siguiente punto.
El desarrollo motor temprano del bebé favorece su sociabilidad.
Habilidades motoras gruesas, de los grandes músculos, que incluyen movimientos de las extremidades y son muy importantes para la fuerza y coordinación.
Desarrollo de la psicomotricidad fina: la destreza con los dedos y otros músculos pequeños, que evolucionan mediante actividades que requieren pequeños movimientos coordinados.
Habilidades visuales, ya que el bebé aprende a enfocar y seguir la trayectoria de sus partes del cuerpo, de los juguetes, pelotas...
En relación al punto anterior, se produce una mejora de la coordinación visual-motora.
Habilidades táctiles, ya que el bebé descubre texturas diferentes o cambios de temperatura y no solo con las manos, recuerda que en estos primeros meses la boca es el principal medio de exploración.
Se desarrolla la apreciación del propio cuerpo, necesaria para que el bebé adquiera un conocimiento de sí mismo y de los demás, patrones espaciales...
Habilidades cognitivas en general, en buena medida desarrolladas por todos los puntos anteriores: memoria a largo y corto plazo, capacidad de organización, de atención, de resolución de sencillos problemas...
Todo se consigue estimulando el movimiento del bebé. Además, que a medida que el bebé crece las distintas habilidades se irán desarrollando según haya adquirido las anteriores, las mas tempranas.
Pero en definitiva estas son las habilidades que el "ejercicio" desarrolla en el bebé . Y recuerda: siempre hay tiempo para pasarlo junto a nuestro niño, incluso hacer ejercicio junto a él nos ayudará a mantenernos en forma y a que tome ejemplo de hábitos saludables.
Foto | Thinkstock En Bebés y más | La importancia de la estimulación temprana, Factores de riesgo para los problemas de aprendizaje, Desarrollo motor grueso y fino