Los probióticos son aquellos productos alimenticios en los que existen bacterias que ayudan a reforzar nuestro sistema inmunológico, estas bacterias además pueden sobrevivir a una digestión llegando vivas al colon y ayudando a restituir la flora intestinal que pueda haber sido alterada por alguna causa.
El estudio se realizó sobre 90 lactantes que alimentados únicamente con lactancia materna, sufrían cólicos. La mitad de estos lactantes siguieron el tratamiento con probióticos y al resto se les administró un medicamento para los molestos gases (simeticona). La conclusión del estudio dio a conocer que el 95% de los niños a los que se les administraron bacterias probióticas, en tan sólo una semana mejoraron en cuanto a los síntomas de cólicos, los llantos característicos de los bebés se redujeron notablemente.
Según los autores del estudio, lo que evita estas molestias son las bacterias probióticas, que podrían tener un efecto antiinflamatorio sobre la mucosa gástrica.
Aunque todavía es necesario ampliar el estudio, este podría ser un buen comienzo para lograr aliviar un mal que sufren la mayoría de bebés en sus primeros meses de vida y que tanto nos hace sufrir a los papás, por la impotencia de verles sufrir y no poder aliviar sus molestias.
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