Se trata de unas conclusiones iniciales que necesitarán nuevos estudios para corroborarlas, pero las primeras pruebas y experimentos realizados con animales de laboratorio muestran la posibilidad de que la exposición a este producto pueda causar defectos de nacimiento y algunos problemas en el desarrollo de los bebés. El producto en cuestión había sido relacionado anteriormente con la aparición de cáncer o déficit de atención entre otros problemas. ¿Cómo se entra en contacto con este componente? A través de algunos productos cotidianos como hemos mencionado antes, pero en el caso de los bebés, los biberones, los juguetes, etc., dependiendo de la cantidad de BPA encerrada en la composición del plástico, el grado de peligrosidad es mayor o menor, aunque en todos los grados afecta a los bebés.
Las futuras mamás que entran en contacto con este producto químico tienen el riesgo de incorporarlo en la circulación sanguínea y en consecuencia, el producto alcanza al futuro bebé pudiendo provocar los riesgos de malformación. Como hemos dicho antes serán necesarios más estudios, pero la voz de alarma ya ha sido dada.
Vía | Alegent Más información | Environment California (Bisphenol-A) Más información | National Toxicology Program