El estreñimiento es una alteración muy común en el embarazo. Combatir este trastorno y favorecer el tránsito intestinal no es complicado, aunque debes seguir algunas pautas en tus hábitos alimenticios.
Necesitas una dieta rica en fibra, toma unos 25 o 30 gramos a través de los alimentos, es muy recomendable. Toma un promedio de dos raciones de frutas con piel o semilla como naranjas, ciruelas, higos y sustituye los zumos de fruta por fruta entera ya que el jugo contiene menos fibra.
Las legumbres también son muy recomendables, tomar dos veces por semana guisantes, garbanzos, alubias, te ayudará en tu acopio de fibra. También debes incluir dos raciones de verduras por día, y si una de ellas es cruda, como por ejemplo tomates, lechugas, espinacas, mucho mejor.
Combina esta dieta también con los cereales integrales como el arroz, la pasta, las galletas, el pan, los cereales del desayuno. Para beber nada mejor que el agua, al menos un par de litros al día y esto es porque la fibra no produce ningún efecto a no ser que se combine con líquidos, o sea, que también puedes tomar abundantes zumos, leche, infusiones, etc. Y recuerda que para poder aprovechar los beneficios de la fibra, no cocines demasiado las verduras y utiliza técnicas como la comida al vapor, de esta manera podrás evitar el estreñimiento al menos en parte.
Seguramente tendrás alguna amiga que te habrá comentado algún truquillo o algún remedio para evitar el estreñimiento, estas son ayudas complementarias pero no funcionan igual en todas las personas ya que cada organismo es diferente.
Algunos de estos consejos son el tomar un par de ciruelas con agua antes de acostarte por la noche, tomar zumo de naranjas o ciruelas pasas rehidratadas al levantarte en ayunas, desayunar compota de manzanas o añadir salvado de avena a la dieta.
En todo caso si el estreñimiento persiste, lo mejor es acudir al médico para que intente resolver la dichosa molestia.
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