El usar las cosas que vamos a desechar para hacer, reciclándolas, un objeto especial y único es una actividad de artesanía casera que puede ofrecernos muchas posibilidades. Hoy os muestro este marco de fotos artesano que podeís perfectamente adaptar y hacer con vuestros hijos.
Hace falta una de esas bandejas en las que vienen los alimentos que compramos en el super, unos botones bonitos, pintura y una foto que os guste. Mi hijo lo ha hecho como trabajo manual para su clase de arte, pero los más pequeños podrán también disfrutar de la experiencia con vuestra ayuda. Es una idea divertida y preciosa con la que preparar, además, regalos personalizados con los que él podrá obsequiar a la familia y se sentirá muy orgulloso.
La bandeja hay que cortarla dejando el espacio adecuado para poner la foto elegida. En la parte sobrante pegamos la foto. El marco hay que pintarlo de un color alegre, con pinturas acrílicas, y pegarle botones alegres o pedacitos de papel brillante, como el de envolver los caramelos.
Luego, por la parte de atrás, pegamos con celo la foto y añadimos un cartón duro, como muestro en la imagen de la parte de atrás, para que se sostenga.
Con este marco de fotos artesanal el éxito está asegurado. Será un recuerdo especialmente bonito, personal y hecho con la ayuda de vuestros pequeños.