En la lista de la compra de los padres cada día se cuelan más productos tecnológicos. Uno de los imprescindibles suele ser el vigilabebés o intercomunicador, dispositivo que sirve para mantener la comunicación con los más pequeños de la casa cuando no los tenemos cerca o bajo nuestra mirada.
El vigilabebés es un gadget que suele tener especial éxito entre los padres primerizos, para los cuales muchos aspectos del día a día son nuevos y a menudo les causan intranquilidad. Poder escuchar o ver al bebé cuando ya se ha acostado y nosotros estamos en otra estancia suele reconfortar y dar sensación de seguridad. También podemos controlar en la distancia si lloriquea y hay que ayudarle a encontrar el chupete o lo localiza por él mismo, si se desarropa …
Como parte del especial de tecnología para bebés, vamos a repasar en este primer artículo los tipos de intercomunicadores para bebés que existen y esta misma semana aprenderemos sobre las claves para saber en qué fijarse antes de comprarlos y haremos una selección de vigilabebés básicos y otra de modelos más avanzados.
Tipos de intercomunicadores para bebés
Los vigilabebés suelen ser gadgets compuestos por un elemento emisor y otro receptor. El emisor, colocado cerca del bebé o la estancia que queremos tener vigilada, se encarga de grabar las imágenes y enviarlas de forma inalámbrica en la mayoría de los casos al emisor, que es el aparato que suelen tener los padres o familiares cerca.
Aunque el objetivo final de los vigilabebés es más o menos común, hay diferencias sustanciales entre ellos como para poder establecer una clasificación, la cual podemos realizar atendiendo a varios criterios.
Una clasificación básica de los vigilabebés nos dejaría con modelos analógicos y digitales. Los primeros suelen ser los más asequibles y básicos, sencillos de usar pero con la complicación de ser sensibles a las interferencias de otros aparatos del hogar digital o incluso de otros intercomunicadores de los vecinos. En esos modelos, que haya bastantes canales de funcionamiento es vital para poder esquivar las interferencias.
Actualmente, la mayoría de los vigilababés son digitales (de tipo DECT, como los teléfonos inalámbricos) y con ello nos ahorramos los problemas de interferencias o ruidos molestos.
Sonido, vídeo e incluso movimientos
También podemos diferenciar entre intercomunicadores según la señal que transmitan. Así, podemos distinguir entre:
- Vigilabebés de sonido: básicamente se encargan de transmitir sonido desde el emisor al receptor. Los hay que se activan por ruido y otros que transmiten permanentemente. Es interesante disponer de un modelo con el que sea posible tanto escuchar como poder transmitir nuestra voz.
- Vigilabebés de vídeo: añaden la emisión de imágenes en movimiento a los anteriores, y por lo tanto, el receptor debe contar con una pantalla y es más grande y caro. También existen modelos que envían la señal directamente al televisor, que pueden ser consultados desde un ordenador con acceso a Internet o que disponen de visión por infrarrojos para observar al bebé en la oscuridad.
- Vigilabebés con sensor de movimiento: el riesgo de muerte súbita que existe en los recién nacidos es de los mayores motivos de preocupación de los padres primerizos. Además de los consejos sobre temperatura de la estancia, colocarlo durmiendo boca arriba, no fumar en su presencia o usar chupete, algunos padres pueden preferir sistemas de vigilancia con sensores de movimiento para que les alerte en el caso de que el bebé deje de respirar. Esos sistemas pueden estar basados en componentes físicos o directamente en software encargado de analizar las imágenes que va grabando y determinar en consecuencia si la respiración del pequeño está dentro de la normalidad. También son demandados por padres de bebés prematuros.
Otros extras comunes a los intercomunicadores, ya sean de vídeo o sonido, son por ejemplo la posibilidad de emitir con ellos música, servir de luz de apoyo o incluso de proyectar imágenes. Y algunos incluso son capaces de medir la temperatura de la habitación y que establezcamos alarmas personales.
En la próxima entrega de este especial hablaremos de lo que debemos tener en cuenta a la hora de escoger el vigilabebés que mejor se ajuste a nuestras necesidades o preferencias.