No hace mucho comentábamos la poca atención que la dislexia recibe en muchos países, lo que povocaba deficiencias en el tratamiento de este problema que necesita ser detectado cuanto antes. Volveremos sobre este tema, pero antes nos detenemos en la definición de la dislexia.
La logopeda Maribel Martín explica las claves de esta disfunción, señalando que la dislexia es un trastorno neuronal en la lecto-escritura que dificulta en distintos grados la capacidad para aprender a leer y a escribir. Este problema de origen neuronal es congénito, por lo que en muchos casos se transmite de padres a hijos.
Pero es importante señalar que no conlleva retraso mental ni carencias del entorno socioeducativo. De hecho, los disléxicos suelen tener un coeficiente intelectual alto.
El problema reside en que los disléxicos tienen dificultades para distinguir y memorizar las letras o grupos de letras, el ritmo y orden de su colocación para formar las palabras, lo cual conlleva una mala estructuración de las frases. Lo que para cualquier otro es claramente una "b", para los disléxicos puede ser una "p" o una "d".
Además, la dificultad puede verse agravada porque muchas veces la naturaleza introspectiva del niño o niña disléxico hace que obvien o "disimulen" su problema, porque para ellos esa dificultad es un "fallo" normal en ellos.
Gran parte de las dificultades académicas, cuando no se ha detectado la dislexia, provienen de que no entienden lo que leen, se aburren, dejan de prestar atención y al final en el aula puede parecer un problema de conducta lo que es un problema de aprendizaje. Muchos alumnos "vagos" o indisciplinados pueden ser disléxicos.
De ahí la importancia de la detección temprana de la dislexia, para evitar que esas dificultades degeneren y sean tratadas cuanto antes para minimizar los daños en la adquisición de la lectura y escritura y de los contenidos de las distintas asignaturas más adelante. La "acomodación" y superación de la dislexia es posible (no la cura) mediante unas actividades adecuadas y un seguimiento de la evolución del problema.
El éxito, incluso el reconocimiento mundial puede llegar a una persona con dislexia. Como hemos dicho, el trastorno no está reñido con la inteligencia o con la creatividad. La lista de personajes célebres que han sido y son disléxicos es larga: desde el popular Boris Izaguirre a Winston Churchill, el pintor Pablo Picasso, Bill Gates... Incluso de un genio como Albert Einstein sus profesores decían que era lento mentalmente, poco sociable y divagaba constantemente.
Aunque también, ocultos, habrá la historia de muchos fracasos. Pero nunca es tarde para detectar la dislexia.
Vía | El País Más información | Eduvoz Más información | Federación Española de Dislexia En Bebés y más | Dislexia, reconocerla para ayudar a tu hijo En Bebés y más | La dificultad de lectura que padecen los disléxicos, relacionada con una alteración de la materia gris En Bebés y más | La desatención a la dislexia y las dificultades para detectarla en la escuela