Siete juegos para ayudar al niño a dejar el pañal de una forma respetuosa y divertida
Dejar el pañal es uno de los hitos más significativos de la transición de un bebé a niño. A veces les puede costar, especialmente si debemos agilizar el proceso por los requerimientos específicos cuando van a empezar la educación infantil, así que lo mejor que podemos hacer es plantearlo como un juego para lograrlo de una forma respetuosa y divertida.
Lo primero que debemos tener en cuenta es que sentarse en el orinal y esperar no es algo divertido, menos para un bebé que no entiende por qué tiene que estar ahí incómodo y sin hacer nada. Por eso debemos acompañarle, buscar algo que le entretenga y que a su vez le ayude a entender qué es lo que debe pasar cuando se sienta ahí. Jugar, por supuesto, es el mejor camino a seguir.
Libro con sonidos
Los libros son de lo mejores recursos que podemos utilizar para explicarle a un niño pequeño cualquier cosa que queramos. La parte gráfica les ayuda a asimilar mejor lo que les expliquemos con palabras, y seguir el hilo de una historia que empieza y tiene un final feliz (en este casi, hacer caca o pis en el váter), les mostrará de una forma más sencilla qué es lo que deben intentar hacer.
A mi me funcionó estupendamente con mis dos hijas. La primera tenía bastantes reparos a la hora de sentarse en el orinal, pero cuando le enseñé el cuento con sonidos que le compré, todo cambió radicalmente. Obviamente solo lo sacábamos cuando era hora de sentarse (la ponía cada hora más o menos a ver si había suerte), y al final le terminó gustando tanto ese momento, que terminó avisando cuando tenía ganas. Os dejo el enlace del libro en cuestión (aunque hay muchas otros libros estupendos para este fin):
Voy sola al baño: Con divertidos sonidos y una canción (Libros con elementos para jugar)
Cantar canciones
Cantar es algo que les encanta a los niños y más si lo hacen con nosotros. Podemos aprendernos una canción (intentemos evitar las pantallas también en este caso), y podemos incluso inventarnos una pequeña "coreografía" en la que involucremos las manos y gestos. Sin duda, puede llegar a ser un momento muy divertido tanto para ellos como para nosotros.
Tabla de medallas
Podemos dibujar (o imprimir y pegar, si sois tan mal@s dibujantes como yo), un bebé sentado en el orinal para que se sientan identificados, pegarlo cerca del orinal, y dibujar un corazón cada vez que logre hacer caca o pis. No hace falta premiarles cuando consigan hacerlo, con dibujar un corazón o una carita feliz es suficiente.
Cacalendario
Este es una especie de calendario que simula el juego anterior, pero que contiene pegatinas para desarrollarlo de una forma más "pro". Cada página contiene los días de la semana e incluye 280 pegatinas de cacas y pis para que el niño las pegue cuando lo consiga. Una vez haya adoptado el hábito, os recomiendo dejárselo para que juegue (si las quiere poner todas a la vez o hay problema), para que celebre su triunfo de niño mayor.
Mi Cacalendario: libro para dejar los pañales con pegatinas y tabla de recompensas y empezar con el orinal
Jugar con agua
Jugar con agua está relacionado con estimular las ganas de hacer pis. Puedes valerte de embudos y botellas con tapones para explicarle que si hacemos un pequeño esfuerzo, podemos aguantar un poco (como si pusiésemos el tapon), hasta llegar al váter. Es una forma muy práctica de explicarles el concepto del control de su cuerpo.
Jugar con plastilina
Aunque al principio no veamos mucha relación, el jugar con plastilina puede ser un buen entrenamiento para que los niños se relacionen con sus propios excrementos, ya que para ellos generalmente es más fácil lograr hacer pis en el orinal, que hacer caca.
Puedes jugar a hacer cacas de plastilina y tirarlas en un vaso de plástico hasta que alguno logre meterlo dentro, mientras asocias con palabras a que debemos hacer lo propio con los nuestros, pero dentro del orinal (o váter).
Ropa interior
No hay nada más motivador para un niño en este proceso de dejar el pañal, que comprar su primera ropa interior "de mayor". Llevarle para que elija (si encuentra algunos de su personaje favorito vais a triunfar, lo digo por experiencia propia), es una experiencia muy divertida y querrá ponérselos enseguida. Eso sí, compra muchos porque al principio los mojará con frecuencia.