Fumar es altamente nocivo y más aún si se hace durante el embarazo, provocando consecuencias nada deseables para el bebé. La OMS habla de que la exposición al humo del tabaco aumenta el riesgo de parto prematuro, muerte fetal, bajo peso al nacer o sufrir algún defecto genético.
Pero, ¿cuál es la reacción del feto dentro del vientre cuando su madre fuma? ¿Es capaz de percibirlo? Investigadores de la Universidad de Durham, en Reino Unido, confirman que sí y comparten imágenes de diferentes bebés en gestación mientras sus madres fuman cigarrillos: sus movimientos faciales en ecografías 4D hablan por sí solos sobre los efectos nocivos del tabaco.
Una imagen vale más que mil palabras
Y en este caso la afirmación es más consistente que nunca. Las ecografías en 4D muestran una secuencia de movimientos de dos fetos a las 32 semanas de gestación: de un bebé de madre fumadora (arriba) y de uno de madre no fumadora (abajo).
Por eso, tras el estudio publicado en Acta Pediátrica, los investigadores de las universidades de Durham y Lancaster afirmaron que los resultados añaden peso a las pruebas existentes de que el tabaquismo es perjudicial para el desarrollo de los bebés en el útero materno.
La autora principal, la Dra. Nadja Reissland, del Departamento de Psicología de la Universidad de Durham, señala que "Los patrones de movimientos faciales del feto difieren significativamente entre los fetos de madres fumadoras y los de madres no fumadoras".
"Nuestros hallazgos coinciden con otros en que el estrés y la depresión tienen un impacto significativo en los movimientos fetales, y deben ser controlados, pero además apuntan al hecho de que la exposición a la nicotina 'per se' tiene efecto en su desarrollo por encima de los efectos del estrés y la depresión".
El estudio muestra que los bebés de embarazadas fumadoras gesticulan más con la boca y se tocan más la cara, mientras que sus movimientos en general son menores de los que se considera normal durante el embarazo.
Entre las razones, los investigadores sugieren que el sistema nervioso central del bebé, que controla los movimientos en general y los movimientos faciales en particular, no se desarrolla al mismo ritmo y de la misma manera que en los hijos de madres que no fuman durante el embarazo.
¿Cómo se realizó el estudio?
Los investigadores observaron 80 ecografías en 4D de 20 bebés durante la gestación, para evaluar los movimientos sutiles de la boca y el tacto. Las exploraciones se realizaron en cuatro intervalos diferentes, entre las semanas 24 y 36 de embarazo.
Cuatro de los bebés eran hijos de madres que fumaban una media de 14 cigarrillos al día, mientras que los otros 16 eran de madres no fumadoras. Todos fueron evaluados y nacieron sanos.
El profesor Brian Francis, de la Universidad de Lancaster (Reino Unido), coautor del estudio concluye:
"La tecnología nos permite ver lo que antes estaba oculto, revelando cómo el tabaquismo afecta al desarrollo del feto de formas que antes desconocíamos. Se trata de una prueba más de los efectos negativos del tabaquismo en el embarazo".
Y añade que:
"Se necesita un estudio más amplio para confirmar estos resultados e investigar los efectos específicos, incluida la interacción del estrés materno y el tabaquismo".
Vía | Durham University
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