No se sabe a ciencia cierta el origen del problema, aunque se lo relaciona con algunas posibles causas como una deficiencia vitamínica, un componente genético o una deficiencia molecular. La preeclampsia debe ser controlada debidamente pues de otra forma supone un grave riesgo tanto para la madre como para el bebé. No tratada a tiempo podría ocasionar problemas en el funcionamiento del sistema de coagulación de sangre materno representando una amenaza para la vida de ambos. Podría desencadenar un parto prematuro, desarrollar complicaciones en el parto e incluso ocasionar la muerte del bebé.
Su detección es muy importante. Es por eso que cada vez que vamos a la consulta prenatal nos toman la tensión arterial. Pero al parecer, habría una forma más eficaz de detectar en el primer trimestre de gestación el riesgo de padecer preclampasia. Mediante un análisis de sangre que detectara los niveles de la proteína VEGF165b, la cual se cree que tendría influencia en la preeclampsia.
La noticia la han dado los autores de un estudio realizado por científicos de la Universidad de Bristol (Inglaterra) quienes encontraron un aumento de la proteína VEGF165b a las doce semanas de gestación en las mujeres con embarazos normales, mientras que en las mujeres que desarrollaron preeclampsia apenas había una elevación de esa proteína.
Es decir, que si se detecta que los niveles no han subido, la paciente tiene más posibilidades de sufrir preeclapsia en los últimos trimestres de embarazo.
Según los expertos, detectarla a tiempo permitiría suministrar aspirina, que disminuye la incidencia de preeclampsia en un 15%. Sin duda, una detección precoz sería un significativo avance en el tratamiento de la enfermedad.
Vía | La Opinion En Bebés y más | ¿Qué es la preeclampsia?, Relacionada la deficiencia de 2 moléculas en el organismo con la preeclampsia, El estrés no tendría nada que ver con el desarrollo de preeclampsia en el embarazo