Con el tiempo te das cuenta de que sus gustos y necesidades son más sencillos pero ya es tarde… Con el transcurrir de los meses te das cuenta de que lo que es imprescindible para otros para ti ha sido inutilizado y al revés. ¿Una mochila portabebés? Jamás la usé pero a otras parejas les ha sido utilísima. ¿Un mueble cambiador? Otro trasto más… y así sin parar.
Luces, música y ¡acción!
Hay algo para mí que ha sido imprescindible desde que el pequeño comenzara a mejorar su visión, tan deficiente al nacer y eso ha sido un proyector de luz y música. Imprescindible diría yo los meses antes de que gateara y se diera la vuelta ¿qué mejor manera se nos ocurre de entretenerle cuando su cabecita sólo puede estar mirando hacia arriba?
El pingüino proyector musical es sencillamente perfecto. Le estimula visual y auditivamente, se relaja con sus suaves melodías y sus dibujos le irán mostrando poco a poco el mundo que se le avecina. Permite la opción de cambiar los dibujos a través de unas láminas, los más sencillos para los primeros meses, los más detallados para cuando su visión haya mejorado. Música clásica, nanas o sonido de la naturaleza sonarán durante unos 15 minutos, ofreciéndote la posibilidad de diferentes combinaciones de luces y sonidos. ¡Música, luz y acción pequeño! El mundo acaba de comenzar para ti y este es un maravolloso prólogo.
En Espacio Feliz | ¿Qué hace feliz a un bebé de 12 meses?