Dicen que la música es un lenguaje universal y es en los bebés dónde esta afirmación cobra especial sentido, ya que es muy probable que se comuniquen antes con el sonido de sus instrumentos musicales que con la voz.
Aunque su expresión a través de la música no sea tan artística como la de un adulto con conocimientos en este campo, sí que le puede resultar beneficiosa además de divertida.
No conozco a un solo niño que no le guste la música. Desde muy pequeños nos dejan boquiabiertos con su sentido del ritmo y no tardan en tararear la letra o tratar de reproducir la melodía en sus instrumentos de juguete.
Aunque hay una variedad enorme de juguetes musicales en el mercado, no todos son apropiados para su edad y algunos están diseñados para emitir sonidos, sin tener en cuenta aspectos como el desarrollo o aprendizaje de nuestro pequeño.
Un instrumento musical adecuado a la etapa de desarrollo en la que se encuentra nuestro bebé, debe aportarle diversión pero también tiene que contribuir a su desarrollo físico, cognitivo, emocional y/o social.
Aprender algo más que música
Áreas como la motricidad fina, la coordinación, las habilidades sensoriales, la comunicación, la creatividad...están muy relacionadas con la música y la interpretación de ésta a través de los instrumentos.
Los niños aprenden a comunicarse emitiendo sonidos y creando melodías, vale, lo admito, a veces insufribles, pero que contribuyen en su continuo aprendizaje mientras observan el efecto de sus acciones.
Algunos instrumentos requieren más habilidad a nivel motriz como por ejemplo los que llevan teclado (piano, acordeón…), otros sentido del ritmo y coordinación como los de percusión, pero la mayoría aportan conocimiento y diversión a los niños.
Mi primer piano
El piano es probablemente uno de los instrumentos más demandado por los padres y que más gusta a los niños, ya que podemos encontrar versiones adecuadas para todas las edades. Desde el Gimnasio-Piano Pataditas para los más peques hasta el Piano Aprendizaje de Fisher-Price, que además de animarle a crear sus propias melodías y fomentar su creatividad, incorpora otras funciones que le convierten en un instrumento de juguete muy completo.
Indicado para niños a partir de los 9 meses, el Piano Aprendizaje invita al niño a levantarse para practicar de pie. Enseña conceptos básicos como números y letras y conceptos musicales como tempo, tono y estilos. Incluye varias canciones y la posibilidad de componer nuevas melodías.
Sea cual sea la opción elegida para tu bebé, recuerda que lo importante siempre es disfrutar aprendiendo, aunque tal vez descubras además que tienes un genio musical en casa.
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