Si eres padre o madre de un niño o adolescente, seguro en más de una ocasión has recibido ese "bien" a secas que usan como respuesta tras preguntarles cómo les fue en el cole.
Y, desde luego, sabrás que esa respuesta no es suficiente, pues aunque no tienen que darnos un reporte completo de todo lo que hicieron, sí que es importante que como padres sepamos cómo ha ido su día y estar pendientes de cualquier situación que pueda surgir.
Así que si buscas obtener respuestas más interesantes, te compartimos siete preguntas diferentes que puedes hacer a tu hijo después del cole para saber cómo le fue.
Es importante señalar que nunca debemos forzarlos a responder si no les apetece, ni tampoco querramos hacer todas las preguntas en un solo día, pues esto acabará pareciendo un interrogatorio y saldrá el tiro por la culata.
Desde luego, estas siete preguntas son solo un ejemplo de lo que puedes preguntar al verles después del cole, pero también puedes crearte tus propias preguntas, que idealmente siempre deberán ser abiertas (es decir, que no se respondan solo con un "sí", "no" o "bien") pero concretas.
1) ¿Qué ha sido lo mejor de tu día?
Esta es una de las preguntas más sencillas que podemos hacer a nuestro hijo: pedirle que nos cuente cuál ha sido el momento o qué ha sido la anécdota o cosa que mejor le haya parecido de su día.
Esta pregunta, además de evitar el típico "bien", puede dar pie a conversaciones divertidas, en las que nos cuente algo inusual o diferente que sucedió mientras estaba en el cole.
2) ¿Qué has aprendido hoy en clase de...?
Aunque en principio esta pregunta puede ir enfocada a temas específicos o lecciones que estén viendo, en ocasiones también las clases dejan algún aprendizaje interesante. Por ello, puedes motivar a tu hijo a que comparta cualquier cosa que haya visto o aprendido. ¡Quizás incluso encuentran una nueva afición o interés en común!
3) ¿Con quién o quiénes has jugado en el recreo?
Conocer cómo y con quiénes se relaciona nuestro hijo cuando no está en clase es algo que debemos saber como padres. Pero eso sí, siempre respetando sus decisiones y su privacidad, interesándonos en su socialización pero sin caer en querer conocer hasta el mínimo detalle.
4) ¿Qué has almorzado?
Esta pregunta la compartíamos hace tiempo como consejo de una investigadora de Harvard, quien señalaba que hacer preguntas sobre el rendimiento académico puede ocasionar mucha presión en los niños, o incluso generarles la idea errónea de que sólo nos interesan sus logros.
5) ¿Si pudieras volver el tiempo atrás, qué cambiarías del día de hoy?
Si queremos saber si hay algo que esté ocurriendo o afectando la vida escolar de nuestro hijo, podemos preguntarle si alguien le ha tratado mal o si ha habido algo malo en su día. Pero una manera más creativa de hacerlo, es planteándole esta pregunta, que puede ayudarle a hablar con mayor facilidad de alguna situación que le preocupe.
6) ¿Te ha gustado la clase de...?
Es un poco similar a la pregunta que le hacíamos sobre los aprendizajes del día, pero esta variante nos puede ayudar a detectar los talentos o intereses particulares de nuestro hijo, así como las clases con las que está teniendo dificultades o en las que podemos apoyarle.
7) ¿Hay algo que tenga que saber?
Finalmente, y porque la realidad es que a menudo los niños olvidan contarnos cuestiones importantes, esta pregunta puede ayudarnos a enterarnos de diversas cosas, desde como fechas de exámenes, deberes o materiales que tienen que llevar, hasta saber si algo -sea académico o personal- le ha ocurrido en el cole.
Foto de portada | Elina Fairytale en Pexels