Probablemente a estas alturas ya todo mundo conoce, tiene o ha usado uno de los juguetes más famosos del momento: los spinners. Aunque originalmente se pensaron como un objeto que ayudará a favorecer la concentración en niños o como anti-estrés, lo cierto es que los spinners son la sensación del momento.
Sin embargo, es importante que al igual que el uso de cualquier juguete u objeto por nuestros hijos, estemos atentos, si no supervisando por lo menos al pendiente. Hoy un padre alerta a otros, después de que su hijo sufriera un accidente al utilizar un spinner y que hizo que fuera llevado a emergencias.
No es el primer accidente relacionado con un spinner
Hace apenas un mes Armando nos contaba del caso de una niña de diez años que se había asfixiado con una de las piezas de un spinner. Resulta que algunas partes del spinner pueden caerse fácilmente y justamente esto ocasionó que la pequeña se asfixiara mientras iba en el coche con su madre. Al final tuvieron que extraérselo mediante una endoscopía y bajo sedación.
Justamente este fin de semana acudí a una estética y ahí estaba un niño de aproximadamente un año y medio jugando con un spinner. Vi como en repetidas ocasiones se le caía al piso, salía volando una pieza y se la volvía a poner para seguir jugando. Al final la madre se lo quitó pero no tanto porque pudiese asfixiarse, sino porque se le caía constantemente porque era muy pequeño y "lo iba a romper".
Como con cualquier juguete de con partes pequeñas, los fabricantes ponen una advertencia e indican que no es para niños menores de tres años, pero muchas veces los padres hacen caso omiso de eso pensando que su hijo ya es lo suficiente mayor para entender cómo funciona, sin detenerse a pensar que la advertencia es en realidad por el riesgo de asfixia.
El caso más reciente: un uso inadecuado
Un padre reporta en una publicación en su cuenta de Facebook acerca del accidente que tuvo su hijo mientras utilizaba un spinner. De acuerdo con el mensaje del padre el problema ocurrió cuando comenzó a utilizar aire comprimido para hacer que éste girará más rápido.
El spinner explotó y le pegó en la cara, justo entre el labio y la nariz, por lo que el niño tuvo que ser llevado de inmediato a urgencias y recibir 30 puntos de sutura.
Al principio cuando leí la noticia parecía que el niño estaba jugando solo con el spinner, pero al leer el texto con el que acompañó el padre las fotos, él menciona que estaban jugando juntos y era él quien lo sostenía el spinner y el compresor de aire cuando explotó y salió disparado hacia el rostro del niño:
Sé que está publicación no será fácil de ver para algunos pero la siento necesaria. Esto fue ocasionado por jugar con un spinner y aire comprimido (compresor de aire) dirigido hacia él. Yo estaba sosteniendo ambos cuando sucedió. Habíamos estado jugando un rato cuando de repente el plástico del spinner explotó. Ahora estamos en emergencias esperando a que le suturen. Estoy compartiendo esto para que nadie más tenga está estúpida idea que tuve. Tuvimos suerte de que no le diera en los ojos. Podría haber sido mucho peor.
El padre admite que la idea fue de él y no del niño, por lo que realmente la razón no fue el uso del spinner en sí, sino el uso inadecuado que se le dio.
Sigamos las instrucciones del fabricante
Es muy importante que como padres siempre le enseñemos a nuestros hijos a utilizar las cosas de la manera en que recomiendan los fabricantes. El error del padre fue querer hacer girar el spinner lo más rápido posible sin pensar en las consecuencias, a pesar de que se ha aclarado en muchos medios cuál es el objetivo verdadero de este artefacto.
Existe una razón por la cual la mayoría de los objetos que compramos vienen con un manual o una hoja de especificaciones, indicaciones y advertencias, y es precisamente asegurar un buen uso y prevenir accidentes.
A pesar de que "todo el mundo" ahora tenga este u otro juguete, no quiere decir que debamos confiarnos en que son 100% seguros. Siempre debemos supervisar a nuestros hijos y estar pendientes, pues los accidentes ocurren en cuestión de segundos.
Vía | Familias
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