En el blog hemos hablado en ocasiones de algunas mujeres (y hombres) de avanzada edad que han conseguido tener un hijo, y la polémica ha saltado. ¿Tienen derecho a ser padres siendo tan mayores? ¿Son egoístas y no piensan en el futuro del hijo?
Este debate se ve reavivado ahora con una noticia reciente: unos padres italianos han perdido la custodia de su hija por ser demasiado mayores, según se lee en diversos medios de comunicación. Sin embargo, ahora aclararemos que no se trata sólo de eso.
Un tribunal de menores de Turín ha establecido que hay un límite de edad más allá del cual la administración puede quitar un niño a sus padres. Los protagonistas son Luigi Deambrosis, de 70 años, y su esposa Gabriella, de 58, que tienen una hija de un año y cuatro meses.
A la pareja le fue retirada la custodia de la pequeña, de forma cautelar, cuando tenía un mes, y ahora cuatro jueces han dispuesto que la niña debe ser entregada en adopción porque sus padres la concibieron impulsados por "el deseo narcisista de tener un niño", sin plantearse "seriamente que la niña quedará huérfana en edad joven y antes deberá cuidar a unos padres ancianos".
La sentencia, que la defensa juzga basada en prejuicios y contra la que recurrirá, tal vez no hubiera llegado sin que el proceso para lograr el embarazo y el nacimiento del bebé se produjera entre la polémica y se decidiera abrir un procedimiento de vigilancia para el caso.
A esto se suma una negligencia previa: cuando la niña tenía un mes el padre la dejó en el coche mientras descargaba la compra, la niña se puso a llorar y un vecino llamó a la policía.
Este incidente aislado ha hecho que a los padres se los observe con lupa, y los peritos advierten haber detectado en ellos problemas psicológicos.
En Italia la noticia saltó ayer, y en general no se oyeron voces en Italia a favor de la sentencia. Un jurista la cuestionó la sentencia porque se basa en un solo episodio de descuido. Algunos pediatras definieron el fallo «fuera de lugar» porque romper una familia, acusan, es la última solución y «no se puede quitar un niño porque en el futuro sus padres podrían ser inválidos».
La niña fue concebida mediante un procedimiento conocido como "fecundación artificial heteróloga", una técnica de procreación asistida que necesita de un donante. Para buena parte de una sociedad tradicional e influida por las consignas del Vaticano para las leyes reproductivas, este tipo de fecundación artificial es contraria a la unidad del matrimonio, a la dignidad de los esposos y al derecho de los hijos a ser concebidos y traídos al mundo en el matrimonio y por el matrimonio.
Tal vez si el bebé hubiera sido adoptado o concebido como intentó la pareja durante años, no se habría producido esta sentencia en la que confluyen muchos determinantes, que los padres son demasiado mayores, que concibieron a su hija de un modo "poco heterodoxo", que la dejaron en el coche sola durante 40 minutos...
Sus padres están desesperados y piden en los medios italianos que no destrocen su familia ni les quiten a su hija. Un caso muy doloroso, y muy complejo el de estos padres italianos que han perdido la custodia de su hija, que seguirá dando que hablar, seguro. Estaremos atentos a próximas noticias al respecto.
Vía | Diario Vasco Más información | La Stampa En Bebés y más | Madre primeriza a los 70 años, Ser madre después de la menopausia: ¿madres o abuelas?, ¿Debe establecerse una edad máxima para someterse a tratamientos de fertilidad?, Ser madre a los 66 años