Robert Cabré es Diplomado en enfermería y tras haber desarrollado su actividad laboral durante varios años en Hospital Clínico, ahora se dedica a la investigación y formación, también colabora con la asociación ASSSEM (de sanitarios al servicio de la encefalomielitis miálgica).
Este profesional tiene un blog propio dedicado a la atención de afectados por las llamadas enfermedades de sensibilización Central (SSC), en el cual se pueden encontrar diversos artículos relacionados con la presencia de alguna de estas patologías en niños. Me ha llamado la atención especialmente este, llamado “SSC en pediatría, introducción".
Las SSC son cuatro patologías que tienen algunas características comunes: son crónicas, están relacionadas con factores ambientales, sus afectados se encuentran con muchísimas dificultades para ser diagnosticados (a pesar de existir criterios internacionales). Estoy hablando de la Fibromialgia, Síndrome de Fatiga Crónica, Sensibilidad Química Múltiple y Electrohipersensibilidad.
No hace mucho Marcos nos trajo un post muy interesante sobre Fatiga Crónica y adolescentes, hoy vamos a abordar un poco más extensamente este tipo de enfermedades cuando cuándo son niños los que las padecen.
Las SSC en la etapa infantil
El estudio de estas enfermedades (especialmente cuando se presentan en edad pediátrica) está revestido de numerosas dificultades, tanto por su complejidad como por un mal y tendencioso enfoque psicológico desde su origen, lo que ha provocado que muchas de estas enfermedades sean, aún, negadas y otras puestas en cuestión su reconocimiento, lo que limita más las investigaciones al respecto.
Los niños, son los más afectados a pesar de que las manifestaciones estén más atenuadas en esta fase de vida, pero su sistema nervioso, que está en fase evolutiva, pese al intento de adaptarse ante las nuevas eventualidades, no sale indemne de las exposiciones, por lo que los organismos más sensibles a estas exposiciones manifestaran una sintomatología específica y anticipada
Las enfermedades de sensibilización central SSC, muestran unas características propias durante la infancia como etapa de vida del ser humano. E independientemente de la edad de los afectados el proceso de desarrollo de estas patologías es aún desconocido, largo y silente.
En el artículo original, el autor cita otros estudiosos de la materia, y - entre otras cosas - hace referencia a una anterior descripción de la fibromialgia como patología que también puede afectar a los niños, asociada con trastornos de sueño, fatigabilidad, ansiedad crónica, trastornos del ánimo, cefalea y aumento de sensibilidad en tejidos blandos. Siempre teniendo en cuenta que los dolores musculo / esqueléticos en pediatría pueden estar relacionados con múltiples patologías (e incluso con el propio proceso de crecimiento)
Causas que pueden originar estas enfermedades
A pesar de que las causas aún sean desconocidas, actualmente existe constatación científica que hace entender que pueden ser debidas a la exposición de agentes contaminantes, bien por vía de la placenta, bien por la exposición directa a los agentes tanto biológicos como otros contaminantes industriales y químicos.
La generación, aparición ambiental y acción de los “xenobióticos" por la industria química, están causando graves afectaciones a los humanos desde hace ya unos años. La aplicación de los plaguicidas, iniciada con el DDT del que a pesar de estar prohibido y en desuso, actualmente, en muchos países siguen, aún, trasmitiéndose a los embriones al almacenarse en la placenta y traspasarla. Al respecto se han descrito indicios claros de neurotoxicidad en trabajadores expuestos a herbicidas y pesticidas
La verdad es que me alegro por el hecho de que exista una constatación científica sobre algo que muchos sospechamos: la exposición a contaminantes puede ser el origen de distintas patologías de las que apenas hemos oído hablar, y en las que algunos ni siquiera creen. Desafortunadamente el camino que debe seguir una familia con un miembro afectado es de lo más tortuoso en busca inicialmente de un diagnóstico (muchos esperan años para confirmarlo), y posteriormente de un tratamiento, sin contar con que las posibilidades de llevar una vida digamos “normal" se reducen considerablemente.
Según el autor del artículo original, existen publicaciones que apuntan, en algunos casos, a una relación por causas genéticas, inicialmente, como vector de riesgo potencial que se precipita al estar en contacto con dichos agentes biológicos y/o contaminantes en un grado acumulado, “efecto tonel.
Para mí ha sido muy revelador el párrafo que dice lo siguiente 'entender que estas enfermedades son de base bioquímica por afectaciones ambientales, químicas, inmunológicas a estudiar a partir de los datos ya existentes es tan prioritario como la necesidad de abandonar el concepto arcaico, tendencioso y obscuro de los “traumas" infantiles'. Conceptos que nunca se han demostrado como causantes directos de las enfermedades del SSC. De los tratamientos impuestos por estos criterios, tampoco se han constatado curación alguna.
Creo que se necesita una renovación en el abordaje que la Sanidad realiza sobre las SSC, y también que todos seamos conscientes de cómo un Medio Ambiente contaminado puede afectar nuestra salud. La cuestión más importante que nos debemos plantear es “qué podemos hacer para proteger a nuestros hijos de los contaminantes ambientales", y desde luego mantenernos informados es el primer paso importante.
Imagen | mind of fire Fuente / Más información | Robert Cabré En Peques y Más | Factores como la contaminación y la sequía pueden propiciar la aparición del asma, según expertos en pediatría, Bebidas con residuos de fungicida en Estados Unidos, y la protección de la salud