Miguel Calero, ilustrador: "las tabletas aportan una serie de características y prestaciones didácticas que el papel no tiene"

Miguel Calero nació en Madrid y desde pequeño sintió un gran apego a los libros y a los tebeos. Miguel leía desde los cuatro años y con cinco ya lo hacía con fluidez. Sus tardes de invierno las pasaba con la nariz entre las páginas de un libro de Enid Blyton o de un tebeo de Mortadelo y Filemón y era lo mejor del mundo para él. Además disfrutaba copiando los dibujos de esos libros y con 6 años se animó a realizar un documental de cocodrilos en dibujos animados dibujando en las esquinas inferiores de un cuaderno. Aunque sabía que su pasión era el dibujo y quería ganarse la vida siendo dibujante, en aquella época en España te contestaban que si te querías morir de hambre, que lo mejor era un trabajo en una oficina o un banco y estar bien calentito. Miguel realizó estudios administrativos aunque no tuvo demasiado éxito porque a su mente creativa le importa muy poco si el balance cuadraba o no. Así que llenaba el libro mayor de contabilidad de monigotes y aquello no era razonable. Abandonó los estudios y se puso a trabajar. Eso sí lo tenía claro, que si no estudiaba tenía que trabajar.

Como el trabajo que hacía no le satisfacía mucho decidió que no quería sentirse así el resto de su vida, y aunque era consciente de que ser el que mejor dibujaba de sus amigos no le llevaría muy lejos buscó una formación adecuada para aprender y ganarse la vida trabajando con un lápiz. Especialmente aprendió técnicas y conceptos. Estudió en la única academia de Madrid que impartía lo que él quería y tras dos años de formación le invitaron a formar parte del grupo de profesores de la escuela. Y así, durante diez años, compaginó la docencia con los distintos trabajos como freelance que le iban saliendo. En la actualidad se dedica exclusivamente a la ilustración y después de todos estos años ha aprendido dos cosas: que no se deja de aprender nunca y que su madre tenía razón porque a veces, siendo dibujante, se pasa hambre. Aunque Miguel está muy orgulloso porque no cambiaría su profesión por ninguna otra. Y nosotros, sus admiradores, estamos encantados porque su trabajo es magnífico y lo podemos disfrutar, al menos sus últimas creaciones en las aplicaciones de Touch of Classic. En esta entrevista nos va a presentar su experiencia, sus trabajos, sus proyectos y sus opiniones sobre muchos aspectos relacionados con la ilustración en España. Os dejamos con la entrevista que hemos enriquecido con imágenes de trabajos realizados por Miguel y que nos ha dejado publicar.

Qué tipos de libros has ilustrado y para qué edades a lo largo de tu carrera

Un poco de todo. Sobre todo he hecho mucho libro de texto. Algunas portadas para novelas de ciencia ficción y terror. También algunos libros infantiles. Salvo las portadas que mencionaba antes, casi todo lo que he hecho ha estado ligado al público infantil o juvenil. Es curioso porque al principio de mi carrera, yo era más de estilo realista, tipo cómic de súper héroes o Conan. El estilo infantil se me daba fatal y me costaba mucho hacer personajes que tuvieran gracia. Y ahora, después de tantos años dedicado al público más joven, casi se me ha olvidado dibujar realista.

Cuánto tiempo llevas ilustrando para niños y jóvenes

Pues prácticamente desde que empecé a dedicarme a la ilustración, hace ya casi 20 años. Uno de mis primeros encargos profesionales fueron unos libros de lecturas para niños para una editorial que publicaba en Panamá y otros países iberoamericanos. Me costó un montón porque, como te decía, no era el estilo que yo solía dibujar o "consumir". El caso es que al final el cliente quedó contento, con lo que siguió una larga relación profesional ilustrando distintos libros de ciencias naturales, caligrafías, cartillas de lecto-escritura, etc. Siempre para el mercado iberoamericano. Luego hice trabajos para otras editoriales en España, como Pearson Educación, para los que también he ilustrado varios libros de música, por ejemplo.

Dónde podemos encontrar tus ilustraciones

En la red, tengo mi blog Juntando trazos. En él suelo publicar periódicamente mis trabajos, tanto los que son encargos profesionales como los que hago de manera personal, simplemente por entretenerme. También en mi cuenta de Facebook suelo compartir a veces algunos de estos dibujos que hago para relajarme.

La editorial Mestas Ediciones tiene varios libros dirigidos al público infantil o juvenil con portadas e ilustraciones mías.

También la Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife) está publicando una revista cuatrimestral. Se trata de la revista Aventurer@s que es el órgano de comunicación de su club infantil. En ella hay artículos, fichas coleccionables, pasatiempos, todo dedicado a la naturaleza. Los encargados de guiarnos por ella son una pandilla de animalitos muy simpáticos a los que, en cada número, les pasa algo curioso. Yo me he encargado del diseño y maquetación de la revista y la creación de los personajes, así como de hacer dos páginas de cómic en cada número contando las aventuras de estos bichillos.

Touch of Classic es un proyecto que me tiene absorbido y fascinado desde el principio

Y desde hace algo más de dos años, en las apps de Touch of Classic. Un proyecto que me tiene absorbido y fascinado desde el principio. Son clásicos de la literatura universal adaptados para los niños. No son libros electrónicos, sino aplicaciones interactivas que hacen que los niños descubran los clásicos a través de juegos o puzzles, de una manera divertida. Incluso he tenido la oportunidad de escribir la adaptación de una de mis obras clásicas favoritas: Frankenstein. Ahora hemos pasado de los clásicos de la literatura a las óperas. Y de verdad que estoy encantado con este proyecto. Las aplicaciones están disponibles para distintos dispositivos y plataformas y se pueden ver en su página en Internet.

Qué formación tienes

Yo estudié en la única escuela privada que había por aquel entonces que daba cursos profesionales de ilustración. Ahora se llama ESDIP, pero por aquel entonces se llamaba Fastasma. (no es una errata, se llamaba así). Yo tenía claro que quería probar a ganarme la vida con lo que me gustaba, pero también era consciente de que ser el que mejor dibujaba de mis amigos no era suficiente. Así que allí aprendí las bases de esta profesión, las técnicas más utilizadas, etc. Luego, las técnicas digitales y el manejo de software específico ha sido un aprendizaje casi eminentemente autodidacta. Ahora ya se pueden hacer módulos o estudios universitarios centrados en el diseño, la ilustración o incluso los videojuegos. Pero por aquel entonces sólo existía la carrera de Bellas Artes, que tampoco se adaptaba a lo que yo buscaba. De todos modos, el grueso de la formación en el campo de la ilustración o de cualquier disciplina relacionada con el dibujo, acaba siendo la práctica, la experiencia y las "horas de vuelo", es decir, del tiempo que pasas dibujando y pintando. En mi opinión, a dibujar se aprende dibujando. Aunque esas bases técnicas que mencionaba antes son muy necesarias.

Cuál es la experiencia de publicar en un blog gran parte de tu trabajo

Pues fantástica. De hecho, ese trabajo con el que estoy tan encantado, las aplicaciones para Touch of Classic, surgió gracias a que vieron mis trabajos en el blog. Desde luego, lo que tengo claro es que, si no estás en Internet de alguna manera, es como si no existieras. Además, no sé a otros profesionales, pero a mí me encanta tener respuesta de la gente, leer sus comentarios, o incluso sus críticas, siempre que estas sean constructivas, referidas a mi trabajo. No soy de los que piensan que ya lo tengo todo sabido, y creo que leer esas críticas hacen que uno pueda seguir creciendo como profesional. Es una de las cosas buenas que tiene Internet. Ahora es fácil poder intercambiar y recibir opiniones o comentarios con las personas a quienes va dirigido tu trabajo. O dirigirte de la misma manera a otros compañeros de profesión a los que admiro, aunque estén en la otra punta del planeta. Eso antes era impensable. Y sin duda es un buen escaparate para que posibles clientes vean lo que haces y puedan contactar contigo para nuevos proyectos.

Quiénes eran tus ídolos del dibujo de pequeño y cómo has ido evolucionando desde tus primeros dibujos

Bueno, sin duda uno de mis ídolos fue y es Francisco Ibáñez, padre de Mortadelo y Filemón. Crecí con sus dibujos e historietas, y fue uno de los que hizo que deseara poder vivir del dibujo algún día. También Escobar con sus Zipi y Zape. Luego, con más edad, los súper héroes de Marvel, especialmente Spiderman, dibujado por John Romita; los cómic de Conan, con dibujantes que me encantaban como John Buscema o Barry Windsord Smith. Otros autores como Frazetta, con sus portadas maravillosas para Conan, o Creepy hicieron que me interesara por la ilustración más que por el cómic. Por eso, en mis comienzos en la escuela de ilustración, mis trabajos fueron más por esos derroteros en cuanto a estilo. Luego descubrí a ilustradores más relacionados con el mercado editorial infantil o juvenil y me entró el gusanillo por otros estilos totalmente alejados del dibujo más realista y me hizo evolucionar más en ese sentido.

Cuál es el futuro de la ilustración: papel o tabletas

Pues yo creo que ambos. No veo que las tabletas o los dispositivos móviles sean un sustituto del libro en papel. Más bien son medios distintos para contar historias de diferente manera. Las tabletas aportan una serie de características y prestaciones que el papel no tiene, como son la interacción con los elementos de las ilustraciones, narraciones en distintos idiomas, juegos, etc. que en algunos casos son un valor añadido, sobre todo desde el punto de vista didáctico. Sin embargo, un libro ilustrado en un formato grande, bien editado, con buena calidad de reproducción, siempre tendrá su público y su mercado. Llamadme friki o nostálgico si queréis, pero el olor de un libro nuevo al abrirlo, el crujir de las páginas al pasar, es insustituible. De hecho, si te fijas, en los libros electrónicos, en muchas ocasiones, se añade el sonido artificial del paso de las páginas. Por algo será.

De tu experiencia de Touch of Classic, explícanos cómo has conseguido que cada historia tenga personajes con personalidades tan diferentes aunque el ilustrador es el mismo

Pues verás, hay varios motivos por los que he intentado que cada aplicación tuviera un estilo distinto. Primero, por mí mismo. Me aburro si hago siempre lo mismo y la fase del proyecto de buscar un estilo adecuado y diseñar personajes distintos para cada obra es de lo más divertido. Por otro lado, por el usuario. Si cada historia tuviera el mismo estilo gráfico, sería aburrido también para el lector. Ya llevamos nueve títulos entre clásicos de la literatura y óperas, y si todas fueran iguales visualmente, sería un poco chocante y monótono.

Los niños saben perfectamente si las ilustraciones que ofreces son buenas o no

Y por último, por la historia. No se puede tratar gráficamente igual a Don Quijote, que a Frankenstein. Son historias distintas, con personajes distintos y con personalidades bien diferenciadas. La parte de la ilustración hace mucho a la hora de transmitir la esencia de la historia, su atmósfera, sus emociones. Sueño de una noche de verano es una comedia y Frankenstein es una de las historias más tristes que he leído. No pueden ser visualmente iguales.

¿Y como lo he conseguido? Pues no lo sé. Por lo que ya te he contado. Me divierte la parte de creación de personajes, de buscar estilos distintos. Necesito afrontar los trabajos como retos. Lo fácil sería hacer algo que me resulte cómodo y que me salga a la primera. Lo difícil es hacer algo distinto cada vez. Pero también es lo interesante, lo divertido. Cuando empecé a trabajar con Touch of Classic una de las dudas que se les planteó fue que, quizá el mismo ilustrador para todo podría resultar monótono. Acepté el reto de hacer cada historia diferente, y de momento, creo que lo estoy consiguiendo. Claro que también puede ser que tenga personalidades múltiples, ¡como Gollum!

Cómo es el proceso creativo de una aplicación en una tableta teniendo en cuenta la ilustración

El método creativo no difiere mucho del trabajo para cualquier otro medio. Para mí, la primera fase siempre implica un lápiz y papel abundante. Normalmente leo los textos o la historia que hay que ilustrar. Esa lectura me sugiere cosas, me transmite sensaciones, me trae imágenes a la cabeza. La mayor parte de las veces inconexas, pero que poco a poco toman forma a través del lápiz. La música me ayuda mucho. Suelo elegir música en función del tipo de historia que estoy ilustrando y eso me sirve para crear una atmósfera adecuada. Empiezo a hacer bocetos, garabatos en papel. Personajes casi siempre. A veces solo caras o cabezas. Luego cuerpos. De pronto, uno de esos garabatos me dice algo y empiezo a elaborar más esos bocetos. En ese punto, ya tengo definido cual va a ser el estilo.

A partir de ahí, planifico las escenas que tengo que ilustrar. Si son ilustraciones más o menos estáticas, hago los bocetos de lo que será la composición de la escena con sus personajes y su decorado. Tengo que tener claro cuáles van a ser los elementos interactivos o que se van a mover dentro de la escena para planificar el arte final de esa ilustración. Por ejemplo, si uno de los personajes va a mover un brazo, ese brazo hay que dibujarlo aparte, para que se pueda animar. En el caso de las óperas, la cosa fue ligeramente diferente. Diseñé los personajes como si fueran marionetas. Los brazos, antebrazos, cuello, cintura, cabezas, piernas… todo iba por separado para que se pudiera animar y mover durante la obra. Otro reto más, ya que al mover ciertas partes del cuerpo había que tener en cuenta que se veían otras partes del personaje que hasta ese momento estaban ocultas. Y tenía que quedar bien.

Cuando ya tengo todo esto definido, paso a escanear los dibujos de personajes o fondos y comienza la parte digital del proceso. Para ello utilizo distinto software especializado. Es importante que haya una buena comunicación con otra de las partes importantes implicadas en la realización de la aplicación: el programador. Él suele decirme cómo quiere que le presente los artes finales, cuáles son sus necesidades para animar esos personajes, etc. Y yo siempre procuro facilitarles el trabajo lo más posible.

Quiénes son referencia en la ilustración actualmente en España y en el mundo según tu opinión y criterio

Qué pregunta más difícil. Hay muchísima gente en España con un gran talento y me resultaría complicado mencionarlos a todos. Hay muchos profesionales con distintos estilos y todos muy buenos. Y como yo soy tan ecléctico en gustos, tengo muchos favoritos. Además, con las redes sociales es tan fácil conocer artistas de cualquier parte del mundo. Sí es cierto que algunos artistas marcan tendencia y tiende a haber cierta mimesis entre algunos autores, y no hablo de España, sino a nivel internacional, que lleva a los ilustradores e ilustradoras a "imitar" ciertos estilos de relativo éxito. Creo que hay que procurar ser uno mismo. Es inevitable tomar cosas de gente que te gusta o admiras, y que eso acabe influyendo de alguna forma en tu estilo. Pero hay que procurar ser uno mismo y dejar un trocito de tu alma en cada trabajo que haces. Por otro lado, cualquiera que sea capaz de ganarse la vida con un lápiz, con lo difícil que es esto, ya tiene todo mi respeto.

Qué te parece que el mundo del cine se esté apoyando tanto en el cómic y con tanto éxito

Pues creo que esto no es más que el reflejo de la crisis de creatividad que hace ya muchos años (hablo de alguna década incluso) viene afectando al mundo del cine americano. Ya en los 90 se venían haciendo algunas adaptaciones de cómics, novelas, películas de habla no inglesa, etc. Pero ahora es muy evidente. Raro es que alguna película no esté basada en un cómic, un videojuego, una novela o saga de novelas de éxito, refritos de series o películas de los 80. Y he de decir que muchas de las adaptaciones que se hacen no acaban de convencerme como aficionado al cómic, salvo alguna honrosa excepción. Realmente todo esto no es más que una máquina de hacer dinero, y pocas cosas más se tienen en cuenta. No estaría mal si sirviera para que mucha gente descubriera el mundo del cómic a través del cine.

El problema viene cuando algún chico joven o niño ve un cómic de Spiderman y dice: ¡anda, han hecho un cómic de la peli de Spiderman! Los árboles de luces de Hollywood a veces impiden ver el bosque del mundo del cómic, que generalmente es mucho mejor que lo que se nos muestra en la pantalla. La sobre explotación no es buena nunca. Mejor poco y bueno que mucho y en muchas ocasiones malo.

Qué te parece la opción que permite ahora conectar historias entre el cine, el cómic, los videojuegos, las aplicaciones

Que existan diversas formas o medios a través de los cuales contar historias está muy bien. Eso quiere decir que esas historias podrán llegar a más gente. Sin embargo me da un poco de "repelús" la sobre explotación de ciertos temas o el que las historias se diluyan en ese maremagnum de canales de comunicación. Intentaré explicarme.

Si tienes una historia que contar, eliges un medio a través del cual contarla. Y en función de las características de ese medio, tú cuentas esa historia intentando aprovechar todo lo posible las ventajas y esquivar las limitaciones. Esa misma historia puede ser contada en una novela, un cómic, una película, una aplicación móvil, etc. Pero es la misma historia, contada en distintos soportes. Ahora bien, si eliges una historia y parte de ella la cuentas en una película, parte en una novela, otra parte en un cómic. La historia se diluye y se pierde. Que la historia se difunda en distintos medios, es bueno. Pero que se diluya en ellos, no tanto. Me viene a la mente la franquicia Star Wars. Películas, novelas, series, videojuegos, etc. Al final es imposible verlo todo o leerlo todo. Una historia se acaba convirtiendo en eso, una franquicia, una forma de hacer mucho dinero. Y la historia se pierde.

A qué edades se pueden acercar los niños a las historias ilustradas y con qué obras

No creo que haya edad para eso. De 0 a 99 años o más. Hay muchos libros ilustrados adaptados para todas las franjas de edades. Evidentemente cuando son muy pequeños necesitan la colaboración paterna para hacerles partícipes de las historias. Yo a mi hijo, desde los 5 o 6 meses ya le leía y le enseñaba libros ilustrados con dibujos adecuados a su edad. La historia casi es lo de menos en esas edades. Lo importante es que empiecen a disfrutar de esos objetos tan raros llenos de colorines llamados libros.

¿Y con qué obras? Pues con los clásicos universales de Touch of Classic, por supuesto. Barro para casa, claro, pero realmente son un medio fantástico para despertarles la pasión por la lectura.

Cuáles son tus próximos proyectos de ilustración

Pues ahora mismo estoy ilustrando un par de unidades de un libro de texto en inglés de Art & Crafts para 1º de primaria. También estoy terminando de ilustrar un libro sobre parques naturales en España, concretamente el nuevo parque nacional de Guadarrama.

Y un nuevo proyecto con Touch of Classic del que no puedo desvelar nada, únicamente que también tendrá que ver con la música. Tengo también un proyecto personal aparcado hace tiempo. Se trata de un cuento que escribí y empecé a ilustrar con la esperanza de ver publicado algún día. A ver si saco algo de tiempo para dedicarle.

Cómo está impactando la crisis económica en el papel y en vuestro trabajo

Pues como a todo el mundo. La parte del libro de papel dedicada a libro de texto siempre tiene su mercado, y es muy difícil que decaiga. Sin embargo, el libro de ocio está siendo más castigado. En la economía familiar o personal, la primera partida que se recorta es la del ocio. Se compran menos libros, se va menos al cine, etc. La digitalización de contenidos puede ser una opción ya que se abaratan costes de producción. Desgraciadamente, veo libros digitales a unos precios desorbitados, si tenemos en cuenta el coste de producción y los porcentajes de los autores. Libros que en papel están a 20 euros los he visto en digital por 12 o 15 euros. Y para el libro digital no hay gasto de imprenta, ni de almacenamiento. Así, mal vamos.

Sin embargo soy un enamorado del libro de papel, no sólo por los contenidos, sino como objeto coleccionable. Tengo la casa llena de libros, para desesperación de mi mujer. Creo que el libro de papel es necesario, es algo bonito, y hay que buscar la manera de hacerlo rentable y accesible para todo el mundo. El problema es que, en España, las tiradas suelen ser muy cortas salvo que hablemos de bestsellers o de autores consagrados. Hablo sobre todo de libros ilustrados o cómic. Si haces una tirada de 1.000 o 1.500 ejemplares, los costes de producción por unidad son muy altos. Además, los porcentajes que se llevan las distribuidoras y algunas editoriales también, con lo que los precios de los libros son muy caros. De este modo, la gente se lo piensa dos veces antes de gastarse 20 o 30 euros en un libro. Creo que algunas partes implicadas deberían plantearse rebajar sus niveles de beneficio, y no hablo precisamente de los autores.

Qué te parecen los trabajos de animación infantil que se están haciendo en España: Tadeo Jones, Kandor Graphics (Lince ibérico, Justin), Ilion (Planet 51) y qué futuro le ves a esta industria

Pues casualmente, en todas las películas que mencionas, han trabajado antiguos alumnos míos de cuando era profesor de ilustración. Así que me encantan todas. El problema que tienen algunas producciones de animación españolas es el de siempre. El dinero. Pero talento, lo hay a raudales. Creo que películas como las que mencionas tienen poco que envidiar a las producciones americanas. En cuanto al futuro de esta industria, espero que sea largo y fructífero.

Cómo se puede incentivar el interés por la lectura a los niños

Dándoles productos adecuados a su edad e intereses y sobre todo, de calidad. Y eso conlleva buenas historias. Da igual el medio, si la historia es buena, si se identifican con sus personajes, si lo que les cuentas les divierte, se enganchan seguro. Los niños son niños, no tontos. Y saben perfectamente si lo que les estás dando es bueno o no. A veces veo productos dirigidos a los niños tanto en papel como en digital, que no tienen la calidad adecuada. No están cuidados y eso se nota. Hay quien piensa que como son niños, no hay que cuidar la calidad de los textos, o de las ilustraciones, que vale cualquier cosa. Y nada más lejos de la realidad. Y otra cosa que considero importante para no desmotivar a los niños con la lectura es que no todo lo que se les de a leer tenga un componente didáctico. Los adultos no sólo leemos manuales de física, o tratados de botánica. A veces está bien simplemente divertirse, ¿no?

Al ilustrar para niños debemos buscar gustar a los niños no a los críticos de arte

Cómo podemos los padres/madres contribuir a incrementar el hábito de lectura de los peques y el gusto por las ilustraciones

Compartiendo con ellos ratos de lectura. Cuando son pequeños y cuando no lo son tantos. Mi hijo tiene 9 años y de vez en cuando, le gusta que le lea. Por un lado, disfruta del libro y las ilustraciones. Y por otro, de la compañía de su padre o madre. Y me remito a mi anterior respuesta. Dándoles calidad.

Se pueden pasar los libros de éxito en papel a una tableta o hay que hacer algo más

En mi opinión, hay que hacer algo más. Sobre todo si son dirigidos a los niños. Y todos los aspectos que mencionas son muy importantes. No necesariamente poner menos énfasis en los textos, pero sí una buena labor de síntesis en ocasiones. Si nos limitamos a pasar a una pantalla un libro en papel, no estamos aprovechando todas las opciones de las tabletas. Hasta en los libros para adultos o novelas, al pasarlas a formato digital, se les puede añadir extras. Entrevista con el autor, enlaces a páginas web de interés relacionadas con el libro, etc. Y si los libros son para niños, aún más. Añadiendo animaciones, sonidos, narraciones, interacción… En definitiva, aprovechar todas las opciones que dan los soportes digitales para dar valores añadidos a las obras.

Cómo ves el panorama actual en la ilustración infantil

Si echamos un vistazo a los libros o álbumes ilustrados dirigidos al público infantil, encontramos auténticas maravillas en cuanto a ilustración se refiere. Se hacen cosas realmente preciosas. Pero hay ocasiones en las que, a mi modo de ver, se pierde la noción de a quién va dirigida la obra. Muchas veces veo libros ilustrados con un estilo que difícilmente creo que pueda interesar a niños de 5, 6 u 8 años, aunque se recomiende su lectura para esas edades. Los ilustradores, o editores quizá, no lo sé, se pierden pensando en hacer un trabajo muy estilístico, conceptual, llamativo o atrevido, pensando más en conceptos artísticos que en su público objetivo, que son los niños. No me parece mal que se quieran hacer obras dignas de ser expuestas en galerías de arte o museos, pero si estamos dibujando o ilustrando para niños de 6 u 8 años, los mensajes subliminales en la obra, las sutilezas conceptuales, o las técnicas transgresoras no creo que sean lo más adecuado. Al ilustrar para niños, debemos buscar gustar a los niños, no a los críticos de arte. Sin que eso exima de cuidar nuestra técnica, o mimar el trabajo al máximo. Como decía antes, los niños son niños, no tontos.

Y hasta aquí la entrevista con Miguel Calero. Le agradecemos muchísimo su colaboración y su generosidad en las respuestas. Estamos muy pendientes de sus nuevos trabajos en Carmen y el Barbero de Sevilla en Touch of Classic que servirán para consolidar y afianzar una de las grandes series de obras clásicas para niños para ser disfrutadas en dispositivos móviles. Ha sido una gran experiencia conocer más de cerca el trabajo creativo de Miguel y esperamos seguir viendo y disfrutando de sus dibujos e ilustraciones en muchos más proyectos de éxito.

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