Os hemos traído algunas recomendaciones que ofrece la Fundación Española del Corazón para evitar lesiones en los niños durante la práctica de algún deporte. Al parecer existen diferencias en el funcionamiento del organismo (respecto de los adultos) que los hace más vulnerables.
Los riesgos se centran en el aparato locomotor, la regulación de la temperatura y las sobrecargas musculares. Las precauciones a tomar, están orientadas a evitar que una actividad lúdica y gratificante, pueda derivar en la aparición de lesiones. El artículo en que nos hemos basado ha sido desarrollado por el doctor Carlos de Teresa, que es médico del deporte en el Centro Andaluz de Medicina del Deporte (Granada).
Nos cuenta el doctor que el entrenamiento muscular con ejercicios de coordinación / potenciación, contribuye a un crecimiento equilibrado, pero se debe cuidar que las cargas sean moderadas. Y es que los ejercicios con cargas demasiado elevadas pueden interferir sobre el crecimiento, por los efectos en los cartílagos de huesos todavía en desarrollo.
Como ejemplos de actividades recomendadas (y en la entrada original las tenéis todas), podemos citar: hasta los ocho años juegos y ejercicios de psicomotricidad como la gallinita ciega; entre ocho y 11 años potenciar el desarrollo de flexibilidad, coordinación, ejercicios de equilibrio y de sentido del ritmo y el espacio (como ejemplo, comenzar con el monopatín). Hasta los 14 años se prestará atención a las cualidades motoras y aprendizaje de técnica deportiva (con entrenamientos dirigidos a la competición infantil); y de 15 a 18 años ya se puede introducir el entrenamiento especializado, incremento de cargas de trabajo muscular y preparación física específica para cada deporte.
Los ejercicios de estiramiento, dirigidos a mejorar la flexibilidad articular, producen además un efecto estimulante sobre los cartílagos de crecimiento, contribuyendo, por lo tanto, a un crecimiento más equilibrado y fisiológico
Consejos prácticos
El ejercicio en las sesiones de entrenamiento debe empezar y finalizar progresivamente a fin de acondicionar el aparato locomotor.
El calzado siempre debe ser adecuado para cada actividad, debido a la susceptibilidad a las sobrecargas que tienen los niños.
Es aconsejable que los niños acudan a los controles médico deportivos pertinentes, que pretenden detectar las circunstancias propiciadoras de lesiones.
Padres y entrenadores deben vigilar los cambios de carácter ya que una mayor irritabilidad suele ser síntoma precoz de ‘sobreentrenamiento’ físico.
Por lo tanto es aconsejable que los adultos responsables de niños que practican entrenamiento deportivo con regularidad, recuerden estas recomendaciones, al fin y al cabo se trata de potenciar una práctica deportiva más saludable para el organismo de los peques.
Imagen | dbrekke Vía | Fundación Española del Corazón En Peques y Más | Algunos consejos para elegir el deporte que practicaran nuestros hijos, ¿Cómo cuidar la alimentación de los niños deportistas?, Todos debemos implicarnos para potenciar los valores positivos del deporte en edad escolar