Las primeras semanas o meses con el bebé en casa pueden ser muy difíciles para las familias. Como sabemos, ninguna madre reciente debería pasar mucho tiempo sola, especialmente mientras está adaptándose a su nueva vida como madre, pues esto puede ser muy pesado para su salud física y emocional.
¿Y qué es lo que ayudaría a evitarlo? De acuerdo con un estudio reciente, que los padres permanezcan en casa con las madres, podría ayudar a mejorar su salud mental. Te compartimos sus resultados.
Realizado por investigadores de la Universidad de Stanford, el estudio analizó los efectos que había tenido en las familias la baja paternal aprobada en Suecia en 2012, en la que ahora se permitía que ambos padres tomaran su respectivo permiso de maternidad o paternidad al mismo tiempo.
Aunque los permisos eran de los más amplios (480 días), anteriormente no era posible tomarlos al mismo tiempo, y tenían que dividirse para que la madre tomara ciertas fechas, y el padre tomara otros. Con esa nueva ley, ahora es posible que ambos los tomen durante las mismas fechas.
Derivado de esto, los investigadores analizaron el impacto que había tenido en las familias esta nueva ley, encontrando que sus efectos habían sido positivos en la salud mental de la madres, ya que el hecho de que los padres tuvieran la flexibilidad de tomar ese tiempo, ayudaba a mejorar la salud y bienestar de las madres durante el postparto.
El estudio destaca que no solamente se trata de dar al padre una baja por paternidad que sea por un tiempo extendido, sino que sea posible utilizarla en los días en los que ella necesita más apoyo que nunca, como las primeras semanas tras el parto.
Entre los resultados que se encontraron, destacan los siguientes:
- En los primeros seis meses después del parto, disminuyó en un 26% la prescripción de medicamentos para controlar la ansiedad.
- En el mismo periodo, las hospitalizaciones o consultas con un especialista por complicaciones durante el postparto disminuyeron en un 14%.
- La prescripción de antibióticos se vio reducida en un 11%.
Estos resultados, fueron obtenidos al compararlos con los de las madres que tuvieron un bebé y tomaron su baja maternal antes de que entrara en vigor la nueva ley que permite que ambos padres tomen su permiso de paternidad al mismo tiempo.
"La clave aquí es que a las familias se les dio la facilidad de decidir exactamente qué días se necesita que el padre esté en casa. Por ejemplo, si la madre tiene síntomas tempranos de una mastitis mientras amamanta, el padre puede tomar un par de días para estar con el bebé mientras ella descansa, lo que podría evitar que se presentaran complicaciones o la necesidad de antibióticos", comenta Petra Persson, una de las dos autoras del estudio, en un comunicado publicado por la Universidad.
Los investigadores destacan también que, aunque los porcentajes parecen ser pequeños, son de suma importancia, pues como sabemos, son muchas las madres que padecen depresión o ansiedad postparto, por lo que esto podría ser un buen camino para continuar buscando soluciones y medidas que ayuden a prevenirla o reducir las probabilidades de que se presente.
Este estudio nuevamente pone sobre la mesa la necesidad de que en muchos países se luche por obtener mejores permisos de maternidad y paternidad, pues la presencia y acompañamiento del padre durante las primeras semanas tras el parto definitivamente tiene un impacto positivo sobre la salud de las madres.
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Vía | Euronews