Aún recuerdo con horror el momento en el que me enfrenté al armario después de dar a luz a mi primera hija: había dado por sentado (¡¡ilusa de mi!!), que enseguida volvería a mi peso y que después de dar a luz, la barriga desaparecería por arte de magia. Obviamente no pasó ni lo uno ni lo otro, así que tuvo que pasar un tiempo antes de aceptar que ya no era momento de usar ropa premamá, y que mi ropa de antes tampoco me servía.
Tal vez a muchas os suene extraño porque obviamente hay cuerpos muy agradecidos que retoman su forma enseguida, pero el mío no pertenecía a ese selecto grupo. Nunca me había parado a pensar en ello, pero ese proceso de aceptar que este también sería un proceso, me costó. A raíz de mi experiencia, hoy quiero compartir algunos consejos para ese momento de volver a vestirte "de forma normal" tras tener un bebé.
Acepta que tu cuerpo ha cambiado
Enfrentarte a ese momento "qué me pongo", tras dar a luz, puede ser complicado (como me pasó a mi). Creo que a los medios de comunicación les funciona genial "vender" recuperaciones postparto veloces, y cuando nos vemos en esa situación no nos damos cuenta que eso no es lo normal, que nuestro cuerpo necesita un proceso para volver a parecerse a lo que era antes, y que, como todo en la vida, necesita tiempo y mimos para hacerlo.
Prepara prendas cómodas para diario
A tenor de lo anterior, lo normal es que estés hinchada, dolorida y puede que tu zona pélvica no quiera saber nada de estrecheces, así que lo mejor que puedes hacer es preparar prendas cómodas, con las que te sientas bien física y mentalmente.
Si vas a dar el pecho, prepara camisas con botones delanteros
Una de las lecciones que me dejó mi primera lactancia, es que la mejor prenda para dar el pecho son las camisas normales con botones delanteros, así que en mi opinión, no hace falta comprar camisas especiales para dar el pecho. Lo mejor es que las vas a seguir utilizando cuando esta finalice, así que hazte con una buena selección porque se puede convertir en tu prenda fetiche durante una buena temporada.
Necesitaras renovar tu ropa interior
Hablando claro: posiblemente no te va a servir la que tenías antes y tampoco la del embarazo (menos aún si vas a dar lactancia materna). Reconozco que no invertí en "modelazos" para ese momento, porque primaba la comodidad.
Prepara algunos looks "comodín"
Ten en cuenta que enseguida retomarás la vida social, así que prepara algunos looks con los que te sientas cómoda y a gusto para salir. En mi caso, generalmente era alguno monocolor con una blazer más llamativa (lo sé, no era la reina del estilo, pero al menos no me sentía disfrazada).
Adapta tu estilo a la comodidad
En ese baile de emociones y de cansancio que sientes durante el postparto, puede que llegues a desconocer a la persona que ves frente al espejo. Por eso es tan importante sacar un momento para ducharnos, arreglarnos un poco y vestirnos de una forma que nos ayude a enfrentarnos al día a día sintiéndonos mejor. La comodidad ayuda mucho, así que si lo que te hace sentir bien son los leggings, ¡bienvenidos sean!
Deja que los accesorios se lleven el protagonismo
Si definitivamente lo que menos te apetece es pensar en qué ponerte, pero aún así no quieres renunciar por completo a tu estilo, deja que los accesorios obren su magia: un sombrero, una gorra, un colgante, unas buenas zapatillas...
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