¿Qué sería del verano sin los helados y los polos? Tanto mi mujer como yo somos adictos a este refrescante placer y por supuesto mi hijo y mis sobrinas han seguido nuestros pasos por lo que hoy os queremos enseñar las mejores recetas de helados caseros y saludables para refrescar el verano.
La ola de calor se resiste a dejarnos y aunque el refranero diga que "en agosto frío en el rostro" anunciando la cercanía del final del verano, este año no he sentido ese frío y agosto nos está haciendo sudar mucho. Para reducir la cantidad de azúcar y aditivos alimentarios, os proponemos que os animéis a preparar vuestros polos y helados caseros para combatir el calor. Estas son nuestras propuestas.
Polos o helados de hielo
Los clásicos helados de hielo con sabores o los divertidos polos de fruta nos han gustado siempre y hacerlos es tan sencillo como triturar los ingredientes, ponerlos en los moldes y meterlos al congelador.
Buena prueba son estos helados de fruta hechos con melón y kiwi que hicimos el mes pasado o estos otros de melón y yogur que se hacen en un periquete. Si queréis hacer los clásicos de naranja o limón, es muy sencillo. Preparad un almíbar con agua y azúcar a partes iguales y cuando se enfríe, mezclarlo con el zumo de naranja o de limón y congelar. ¿No os está apeteciendo?
Helados cremosos
Para hacer helados cremosos, es necesario utilizar nata, yogur o leche entre los ingredientes. Así conseguimos texturas diferentes al hielo que nos gustan también. Hace tiempo os enseñé mi receta para hacer helados cremosos de fruta caseros y me gustaría enseñaros otras posibilidades.
Para muestra, este helado de frutos rojos que seguro que os hará triunfar o el delicioso helado cremoso de limón que publiqué en Directo al Paladar que se hace con leche condensada... ¿cómo os suena esto?
También podéis usar la receta del helado cremoso de leche de coco y piña cuyo sabor exótico gusta a grandes y pequeños. Una vez hechos los helados, podemos presentarlos con forma de muñeco de nieve para sorprender y hacerlos más apetecibles.
En todo caso, sabemos que tanto los polos como los helados nos hacen disfrutar y refrescarnos en verano. Partiendo de ahí, ¿no es mejor aprender a hacerlos en casa y asegurarnos de que serán más saludables y no contendrán tanto azúcar, aditivos y esencias artificiales?
Pues no es la única ventaja porque os aseguro que estas recetas de helados y polos caseros tienen otra ventaja añadida: están mucho más ricos que los industriales. Animaos a prepararlos que aún quedan muchos días de calor.
En Bebés y más | 17 recetas para hacer con los niños en lo que resta de verano
En Bebés y más | Siete gazpachos adaptados al gusto de los niños