Son muchas las parejas que cuando nace su bebé deciden hacerle fotos artísticas con un profesional que pueda captarlas para luego guardarlas de recuerdo o exponerlas en casa. Son muy habituales aquellas en que los bebés están en una cestita o similar, como mostrando lo pequeñitos que pueden llegar a ser.
La fotógrafa profesional Jocelyn Conway, de Photojos, pensó que podría ser buena idea poder mostrar cómo están los bebés en el útero, y para ello nada mejor que un molde de la barriga de la madre aún embarazada, hecho con yeso, para luego utilizarlo cuando nacen. ¿El resultado? Sus fotos están causando furor.
Como si el bebé volviera "a casa"
Es cierto que no deja de ser un recipiente de yeso, que ha sido bautizado como "Bump Bowl", pero tiene la particularidad de ser de la forma que tenía la barriga que lo albergaba y el complemento emocional de ser un recuerdo de cuando aún estaba dentro.
Al parecer, los bebés se calman mucho al ubicarse en los moldes, como si se tratara de una vuelta a la que fue su casa durante nueve meses, o al menos es lo que Conway explica en The Huffington Post.
Estos moldes los hace cuando la mamá está embarazada de 34 a 36 semanas. Una vez lo tiene y se ha secado añade un poco más de yeso para darle más consistencia y reviste los bordes para que sean un poco más gruesos y queden más suavizados.
El molde, como lo quieran los padres
En las fotos vemos los moldes de las barrigas de color blanco, pero muchas familias le piden que tenga algún color, o incluso que estén decorados. La idea es luego poder guardarlo de recuerdo de la barriga, y de recuerdo del lugar en el que cuando el bebé nació pudo dormir un ratito mientras era fotografiado.
Y el resultado es tan curioso, tan bonito, que las fotos no pasan desapercibidas. ¿No os parece?
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