Cuando un bebé nace de forma prematura, generalmente su desarrollo ocurre a un ritmo diferente que el de un bebé nacido a término. Por eso no se deben evaluar los hitos de crecimiento teniendo en cuenta su edad cronológica sino su edad corregida, incluso hasta llegar a los dos años por el proceso que tiene lugar durante ese período de tiempo.
¿Qué es la edad corregida?
Para explicar el significado de la edad corregida, debemos tener claros dos conceptos:
- Edad gestacional: es el tiempo que ha durado el embarazo y se contabiliza en semanas, desde el primer día de la última regla hasta el día del parto.
- Edad cronológica: es el tiempo transcurrido después del nacimiento. Generalmente se contabiliza en días, semanas, meses y años.
La edad corregida, por su parte, es es la edad que tendría el bebé si hubiera nacido a las 40 semanas. Es decir, a su edad cronológica se le deben restar el número de semanas que se ha adelantado. A través de este cálculo, se "corrige" o "ajusta" la madurez del bebé, según la intensidad de su prematuridad.
Si un bebé ha nacido en la semana 34 (es decir, se ha adelantado 6 semanas), y su edad cronológica es de 3 meses, su edad corregida sería de un mes y medio:
12 semanas (ó 3 meses) - 6 semanas = 6 semanas (ó un mes y medio).
¿Para qué se usa la edad corregida?
La edad corregida es la que se debe tener en cuenta para evaluar el desarrollo físico y neurológico del bebé, tanto en peso como talla y perímetro cefálico. Para llegar a pesar y medir como un bebé nacido a las 40 semanas, el prematuro habrá requerido un tiempo que dependerá de su edad gestacional.
Este cálculo también debería tenerse en cuenta para empezar con la alimentación complementaria, así que deberían empezar a comer a los seis meses de edad corregida. En el caso de los prematuros que amamantan, es muy beneficioso ese tiempo "extra" de lactancia materna exclusiva.
Existe una única excepción en el caso de las vacunas, ya que estas sí que se deben administrar teniendo en cuenta su edad cronológica, por eso deben recibir las vacunas a la misma edad que los bebés a término.
¿Por qué se debe tener en cuenta la edad corregida hasta los dos años?
La edad corregida debe tenerse en cuenta al menos hasta los 2 años, porque el ritmo de maduración de un bebé prematuro es más lento y se calcula que es justo en ese período de tiempo en el que se puede equiparar al crecimiento de un bebé nacido a término.
Personalmente tengo la experiencia de ser la madre de una bebé prematura tardía (nació en la semana 34), que inicialmente no necesitó cuidados neonatales especiales a pesar de haber pesado menos de 2 kg. Sus pulmones funcionaban perfectamente y se enganchó rápidamente al pecho, con lo cual cogió peso rápidamente. Es decir, en principio no notamos apenas la prematuridad de nuestra hija.
Sin embargo a medida que fue creciendo, sí que se manifestó una secuela por no haber llegado a las 40 semanas de gestación: tener poca fuerza en el cuello y no darse la vuelta cuando en teoría debería hacerlo -generalmente entre los 5 y los 6 meses-. Su desarrollo psicomotor correspondía a un bebé de unas 8 semanas menos, así que debimos asistir a un par de terapias para aprender a hacer ejercicios que fortalecieran sus músculos y así estimular en ella el interés por darse la vuelta. En ese momento comprobamos que la edad corregida es muy importante para evaluar de una forma más acertada si el bebé está evolucionando a un ritmo correcto, o si por el contrario necesita algún tipo de estimulación temprana o terapia especial.
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