Se llama Mohammed, tiene once años y vive en Leganés (Madrid). El día 26 de enero, de madrugada, cogió el teléfono y llamó al teléfono de Emergencias 112 para alertar de que su madre se había desvanecido en su casa y no respondía.
Su valentía y tranquilidad para manejar la situación le valió la felicitación del técnico del SUMMA. Gracias a su serenidad, los médicos pudieron tratar a su madre que se había caído al suelo y se había golpeado.
El servicio de emergencias madrileño ha difundido la llamada en las redes sociales por el “aplomo admirable” del niño.
Un niño decidido
"Hola, perdona, mi mamá de repente la acabo de escuchar gritar y se ha caído en el suelo y no sé qué le pasa". Así comenzó Mohammed su llamada al 112, mientras a su lado permanecía su hermano pequeño de seis años, tal y como se escucha en el mensaje de audio difundido por el SUMMA a través de su cuenta de Twitter.
Eran las 6.52 de la mañana. Añade que "está medio dormida, medio despierta" y que respira un poco tras comprobar, como le indica el técnico, que el pecho se le movía.
Mientras, el técnico le tranquilizaba y le animaba por lo bien que lo estaba haciendo, y logró que el niño le dijera la edad de su madre ("entre 31 y 32 años") e indicara perfectamente donde vivían, para que el equipo sanitario pudiera llegar con rapidez.
Ya en el domicilio, los sanitarios del SUMMA encontraron que la mujer se había golpeado al haberse desmayado, pero tras los pertinentes cuidados médicos finalmente fue dada de alta. Tras el susto, Nabila, la madre de Mohammed llegó a comentar, según recoge La Vanguardia que su hijo es tan maduro que "a veces pienso que él es el padre y yo la niña”.
Y añade con orgullo que el niño tiene vocación de ayudar a los demás y que así se siente “feliz”. Es capaz de repartir litros de agua embotellada a los vecinos de edad avanzada de su edificio cuando sufren cortes de agua y "sueña con ganar mucho dinero y ayudar a la gente”.
🤗 Mohammed tiene solo 11 años y ha demostrado un aplomo admirable.
— 112 Comunidad Madrid (@112cmadrid) February 5, 2020
El pasado 26 de enero su madre sufría un desvanecimiento en su casa de #Leganés. El pequeño reaccionaba con entereza llamando rápidamente al 112.
Por fortuna todo quedó en un susto.#Madrid112#ASEM112 pic.twitter.com/ACbjyJQmmN
Otros casos memorables
Por suerte Mohammed no es el único valiente que ha ayudado a su madre. En Bebés y Más os contamos el caso de Luca, un pequeño leonés que, con solo cuatro años, llamó al 112 porque su madre no podía moverse.
También Youssef, de nueve años llamó a emergencias para ayudar a su madre y le salvó la vida; o Chloe, de 10 años, que ayudó en el parto de su tía y cuidó del recién nacido hasta que llegaron los servicios de emergencias.
Así que no es mala idea, si aún no lo hemos hecho, enseñar hoy mismo a nuestros hijos pequeños, antes de que termine el día, cómo actuar si están solos en casa con nosotros y sufrimos algún problema que nos impide pedir ayuda.
Algunas ideas para que llamen al 112 es:
Dejar en la nevera sujeto con un imán, el número de emergencias para que lo tengan siempre a la vista.
Contarles en qué situaciones debe marcar el teléfono: si mamá o papá sufren un accidente, si alguno se desmaya, si se produce un incendio?
Mostrarles cómo realizar la llamada de emergencia desde el teléfono fijo o sin desbloquear el móvil.
Ayudarles a recordar la dirección de casa y nuestro número de teléfono.?
Fotos | iStock
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