La agencia oficial estatal de noticias china Xinhua ha informado del nacimiento de un bebé sano de una mujer diagnosticada con coronavirus en la capital de Heilongjiang (noreste de China).
Su madre estaba embarazada de 38 semanas cuando el jueves 30 de enero llegó a tener 37,3 grados centígrados de fiebre. Se le diagnosticó coronavirus (2019-nCoV), un patógeno que ya ha matado a 362 personas.
Así que en el hospital número 6 de Harbin decidieron practicarle una cesárea de urgencia. Su hijo, que pesó 3 kilos al nacer, se encuentra bien, aunque tanto él como su madre se encuentran en cuarentena.
Puntuación de 10 en Apgar
Según ha explicado el subdirector del hospital donde la madre y su bebé están ingresados, Na Hui, el bebé tenía una puntuación en el test de Apgar de 10, la más alta posible. Además, las pruebas que realizaron al recién nacido el viernes y el domingo dieron negativas.
Los dos están en cuarentena y tienen asignados equipos médicos para monitorear cómo van avanzando.
Así de orgulloso posaba el equipo médico, con el bebé en brazos, para el China Daily.
Good News! A pregnant woman infected with novel #coronavirus gave birth to a healthy baby girl in a hospital in Harbin, Heilongjiang province on Jan 30. After several days’ medical quarantine and observation, both the baby and her mother are in stable condition now. #China pic.twitter.com/JSrzHgsRQy
— China Daily (@ChinaDaily) February 3, 2020
Otro recién nacido en Wuhan
Pero no es el único caso de una nueva vida nacida en pleno brote de una mujer infectada. La semana pasada, la agencia de noticias Reuters citaba a la televisión local de la ciudad de Wuhan (en el epicentro del brote), para contar cómo un doctor del Hospital de la Unión de Wuhan ayudó a nacer a un bebé.
Se cree que la mujer de 27 años, llamada Xiaoyan, se infectó con el nuevo coronavirus cuando estaba embarazada de 37 semanas. Los médicos aún no habían podido confirmar la infección, pero como no podían tratar la enfermedad durante la gestación, decidieron practicarle una cesárea.
Zhao Yin, subdirector de obstetricia y ginecología del Hospital Wuhan Union, explicó que usó dos trajes protectores, gafas y una mascarilla durante la cirugía para evitar contagiarse, ya que la mujer no dejaba de toser y tenía mucha fiebre.
La madre ha expresado en la televisión estatal su único deseo es que su bebé, que pesó 3,1 kg al nacer, esté sano. De momento, el bebé fue traslado a casa para evitar que se contagie, según la agencia de noticias Reuters.
Vía | Newsweek
Fotos | iStock
En Bebés y Más | Protege a tu bebé de las infecciones respiratorias, La epidemia de gripe ha comenzado en España y el virus A es el predominante: como prevenir el contagio, El 26 por ciento de los partos en España es por cesárea, el doble de lo recomendado por la OMS