Italia se ha propuesto cerrar el cerco a los padres antivacunas con un decreto-ley con medidas urgentes que impone la vacunación obligatoria para el ingreso en escuelas infantiles y guarderías.
A partir del curso 2017-2018 los niños deberán cumplir con el calendario de vacunas al día, de lo contrario, si los niños son menores de seis años, se les impedirá el ingreso a la guardería o escuela infantil, y en caso de que superen esa edad se impondrán multas a los padres que oscilan entre los 500 y los 7.500 euros. Incluso se contempla la posibilidad de la pérdida de la custodia de los menores en los casos más graves.
Son 12 las vacunas que deben estar aseguradas ente los cero y los seis años (poliomielitis, difteria, tétanos, hepatitis B, tosferina, Haemophilus influenzae tipo b, meningococo B, meningococo C, sarampión, rubeola, parotiditis y varicela).
El sarampión, las paperas, la rubéola y la varicela, que hasta ahora sólo se recomendaban, serán obligatorias y se aplicarán entre los 13 y los 15 meses. Entre ambas vacunaciones se llevará a cabo la aplicación de las dos correspondientes a la meningitis.
El problema del sarampión en Italia
Uno de los motivos de la obligatoriedad está relacionado con el alarmante aumento de casos de sarampión no visto desde hace décadas. En lo que va de año se han registrado 2395 casos frente a los 840 de 2016 y los 250 de 2015, 89% de ellos no vacunados.
Solo entre Italia y Rumanía suman el 48% del número total de casos registrados en todo el continente europeo, según la Organización Mundial de la Salud.
Vacunación obligatoria, ¿si o no?
En Australia ya está en marcha esta medida y en Barcelona se está valorando la posibilidad de imitarla, pero Italia ha dado el paso sumándose a los países europeos que impone la vacunación obligatoria, en total 14 (Bélgica, Bulgaria, República Checa, Croacia, Francia, Grecia, Letonia, Malta, Polonia, Rumanía, Eslovaquia, Eslovenia y Hungría).