Aunque todos sabemos que los sistemas de retención infantil salvan vidas, todavía quedan padres que por pereza, comodidad o despreocupación no la utilizan con sus hijos, sobre todo en los trayectos cortos, precisamente en las situaciones que se generan más accidentes de tráfico.
Según el estudio realizado a 366 niños menores de 12 años, es a partir de los seis añitos cuando se prescinde más a menudo de la sillita infantil y si se tiene, se le da mal uso. Las estadísticas son estremecedoras, cada semana mueren en España dos niños en accidente de tráfico, 16 sufren graves lesiones y 90 presentan heridas leves. Es importante saber que los datos recogidos “in situ" en 12 hospitales de la geografía española mostraron que los niños que viajaban con sistemas de retención no sufrieron lesiones graves en órganos vitales, no tuvieron que ingresar en la UCI ni fallecieron.
Todavía no comprendemos como los taxis no tienen la obligación de llevar los sistemas de retención infantil en el área urbana, pero mucho menos a los padres que prescinden de su uso poniendo en peligro la vida de sus hijos.
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