Cada vez son más los hombres que acuden a este tipo de tests para comprobar el parentesco con sus supuestos hijos. Los motivos: las infidelidades, la paga en el caso de divorcios y, sobre todo, la desconfianza en la pareja.
Para facilitarles las cosas a los padres, algunos laboratorios permiten realizar pruebas de paternidad caseras.
Nuestros compañeros de Compradicción nos anuncian de Identigene Paternity Test de Rite Aid que empieza a venderse de forma libre en algunas farmacias de los Estados Unidos, además de ofrecer la opción de comprarlo on-line y hacerlo desde casa.
Pero no es el único laboratorio que realiza test de paternidad en ese país, ni tampoco hay que irse tan lejos. En España hay varios laboratorios como Biopaternidad, Biozell o Labgenetics que utilizan el mismo procedimiento.
Envían de forma gratuita un kit a tu casa con los elementos necesarios para tomar una muestra de mucosa con un cotonete bucal (sí, como los que vemos en CSI). Se necesita una muestra del supuesto padre y otra del hijo.
Siguiendo las instrucciones, se guardan en un sobre y se envían por correo al laboratorio donde son analizadas las secuencias de ADN para comprobar o descartar el parentesco. Los resultados son enviados por correo ordinario, vía correo electrónico o a través de Internet al que se puede acceder con una clave personal.
Los precios rondan a partir de los 225 euros dependiendo del laboratorio, de las personas implicadas en la prueba (padre e hijo, padre, madre e hijo, padre y dos hijos) y de la urgencia del trámite.
No creáis que son los hombres los únicos que compran este tipo de tests. Muchas mujeres necesitan asegurarse la paternidad de su hijo y acuden a todo tipo de artimañas para hacerlo, ya que además de la mucosa bucal, también pueden realizarse las pruebas de paternidad a través de otros tejidos como por ejemplo cabellos o sangre.
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