Para frenar la obesidad infantil en ascenso en Europa, las principales compañías de refrescos han acordado restringir la publicidad de refrescos dirigido a los niños. La decisión fue anunciada hoy por UNESDA, la federación de fabricantes europeos que incluye a Coca-Cola, Pepsi, Unilever o Cadbury Schweppes.
Las compañías se comprometen a no elaborar campañas que se dirijan a menores de 12 años y a detener las ventas en escuelas primarias a menos de que su suministro sea requerido por las autoridades.
En la escuela secundaria se ha acordado vender los refrescos junto a zumos, agua y bebidas en las máquinas automáticas, sin publicidad y con mensajes que promuevan la dieta sana. Además las bebidas serán ofrecidas en cantidades que permitan fraccionar la ingesta.
Vía | El Mundo