El mejor momento del embarazo para comenzar a chequear los movimientos del bebé es a partir de la semana 30 o 32 aproximadamente.
Escoge siempre la misma hora del día. Puede ser por ejemplo por la noche después de la cena o cuando tu bebé suela estar más activo.
Quizá cuando estés haciendo cosas no te des cuenta de los movimientos que realiza, pero si te tumbas tranquila ligeramente sobre el lado izquierdo podrás sentir claramente cómo se mueve.
Una vez que estés tumbada ligeramente de lado, te sientas cómoda y relajada, puedes comenzar. Anota la hora en que empiezas y cuenta diez movimientos del bebé, que puede ser desde una patada enérgica, un suave movimiento, una vuelta o un estremecimiento.
Apunta ahora la hora en la que el bebé ha realizado el décimo movimiento. Normalmente realizan los diez movimientos en un lapso de dos horas, aunque hay bebés más activos que pueden realizarlos en menos de media hora.
Puede también que algunos días realice los diez movimientos en veinte minutos y al día siguiente en dos horas, pero lo importante es que no pasen más de dos horas sin que notes movimientos si el bebé está despierto.
Igualmente no es un conteo exacto. Cada mujer conoce los movimientos de su bebé y sabrá notar si hay algo extraño.
Acude al médico si no has sentido al bebé moverse en todo el día o si cada día tarda más y más en realizar los diez movimientos.
Ten en cuenta también que hacia el final del embarazo el bebé tiene menos espacio para moverse y puede que su actividad disminuya un poco durante las últimas semanas.
Puedes confeccionar una tabla semanal con los movimientos del bebé y calcular el tiempo promedio que tarda en realizar los diez movimientos.
Podrá servirle de ayuda a tu médico para controlar el bienestar del bebé, aunque en los centros cuentan con métodos más complejos como el monitoreo fetal.
Más información | tupediatra.com | sutterhealth.org En Bebés y más | Tu bebé se mueve en tu vientre