Se sabe desde hace tiempo que las mujeres que fuman durante el embarazo tienen más probabilidades de tener hijos con problemas respiratorios e incluso asmáticos. Algunos estudios incluso indican que los efectos nocivos del tabaco durante el embarazo pueden llegar a la segunda generación, es decir, a los nietos de la mujer fumadora.
Un nuevo estudio ha concluido que el efecto va incluso más allá, pues ha concluido que fumar durante el embarazo aumenta el riesgo de asma y otros trastornos pulmonares crónicos en la tercera generación de su descendencia, es decir, en los hijos de sus nietos, que son sus bisnietos (que no biznietos).
Datos del estudio
El estudio ha sido realizado en el Instituto de Investigación Biomédica de Los Ángeles, en Estados Unidos, y en él han encontrado que se produce un fenómeno conocido como vínculo transgeneracional, en que los descendientes sufren riesgos de enfermedades concretas sin haber estado expuestas a los causantes, es decir, sin haber estado allí donde había nicotina ni humo.
Obviamente, el que un niño sea asmático depende de muchas cosas más, como el ambiente en que vive, si fuman sus padres, si fumaron durante el embarazo, si hay antecedentes de familiares asmáticos, etc., pero es curioso y da que pensar que el efecto de un embarazo con tabaco pueda llegar a afectar a los niños que nacerán muchas décadas después, como los hijos de los hijos de nuestros hijos.
En palabras del Dr. Virender K. Rehan, uno de los autores del estudio:
Eliminar el uso de tabaco durante el embarazo podría ayudar a detener el aumento en la incidencia del asma infantil y asegurar la llegada de niños más sanos para las siguientes generaciones.
Si os preguntáis cómo puede ser que pase esto, cómo el hecho de que una mujer fume puede afectar a sus biznietos, deciros que cuando una mujer embarazada fuma se produce una alteración epigenética. La nicotina no sólo afectas a las células del pulmón del bebé, sino también a las células sexuales. Al producirse esta alteración, las futuras células pulmonares y sexuales que provienen de las células sexuales ya alteradas estarán también alteradas, produciéndose el paso de la modificación genética de una generación a la otra.
¿Sirve de algo esta investigación?
La duda ahora es saber si esta investigación sirve de algo. Si sabiendo lo que sabemos, si recomendando a las madres que dejen de fumar y a los padres que fuman, sus parejas, que lo dejen también, y sigue habiendo embarazadas que fuman y parejas que no apoyan la causa no dejándolo, si sigue habiendo madres y padres fumando delante de sus hijos, con sus hijos metiéndoles bronca por fumar delante de ellos, poco va a cambiar la gente por enterarse de que el tabaco fumado en el embarazo actual afectará a sus bisnietos.
En cualquier caso, bueno es saberlo, porque no deja de ser información interesante e importante de hasta qué punto el tabaco puede afectarnos a nosotros y a los demás, logrando permanecer alterando células durante décadas y generaciones. Muy fuerte.
Vía | Noticias de la ciencia, Abstract del estudio en Pubmed Foto | Free Foto Fun en Flickr En Bebés y más | Fumar durante el embarazo, ¿irresponsabilidad o necesidad?, Sólo un 20% de las mujeres dejan de fumar al quedar embarazadas, "Nacer sin humo", guías que ayudan a dejar de fumar durante el embarazo