Con la llegada del buen tiempo resulta inevitable no pensar en lo cerca que están las vacaciones de verano. Para que no te pille el toro y a última hora todo sean prisas y sobresaltos, es el momento de empezar a organizar esa escapada que tienes en mente. Especialmente si viajas con peques, debes tener en cuenta algunas cosas antes de emprender el viaje.
Planifica tu estancia
Para que tus vacaciones de verano en familia sean un éxito, no olvides planificarlas con antelación. Para ello, elije un destino acorde a vuestros gustos pero también que se adapte a vuestras necesidades, teniendo en cuenta si viajáis con bebés, con niños o con adolescentes. Tanto si preferís unas vacaciones de relax en la playa, como si os gusta más la aventura y la montaña o, por el contrario, sois una familia urbanita y preferís pasar el verano en alguna ciudad cosmopolita, encontraréis múltiples opciones a vuestra medida para empezar a organizar las vacaciones.
Ten en cuenta que muchos destinos están enfocados al turismo familiar y ofrecen interesantes propuestas para que paséis unos días muy amenos realizando actividades diferentes y divertidas. En algunos sitios web, como TravelPeques, encontrarás información diversa para planificar tus vacaciones de verano con niños. Si prefieres un viaje ya organizado, la agencia TravelKids es especialista en turismo familiar.
Anota todos aquellos sitios imprescindibles que no quieres perderte. Si pensáis visitar monumentos o museos muy transitados puedes optar por realizar una reserva previa. Si echas un vistazo a las páginas web de los puntos de interés de tu destino, además, podrás ver si durante vuestra estancia organizan alguna actividad infantil o excursión familiar a la que os interese apuntaros.
No te dejes nada
Antes de hacer las maletas, haz una lista de todos aquellos enseres que vas a necesitar durante el viaje, tanto para ti y tu pareja como, especialmente, para los niños. En este caso, además de bastantes mudas de recambio y complementos (como gorro o gafas de sol), no olvides los básicos del día a día (pañales, toallitas, cremas, jabón…); sus juguetes favoritos; y aquellos imprescindibles (carro o sillita de paseo, la cuna de viaje, la trona portátil, la bañera plegable…) que os harán la estancia más confortable.
A la hora de elegir alojamiento, ten en cuenta que algunos de ellos están pensados para familias con niños y, por eso, sus instalaciones cuentan con habitaciones decoradas con motivos infantiles, equipadas con cuna y cambiador; disponen de ludoteca y sala de juegos; servicio de canguro y animación infantil; menús especiales para los niños en el restaurante; organización de rutas familiares... Si optáis por alguno de ellos, además de pasar unas vacaciones diferentes, no será necesario cargar con algunas cosas desde casa, de manera que el viaje será más ligero y cómodo.
Seguridad y confort durante el trayecto
En el caso de los niños, no olvides que ellos también deben ir cómodos y seguros durante el trayecto, sentados en los Sistemas de Retención Infantil (SRI) que establece la normativa. Asegúrate que la silla de auto es la adecuada para su edad y peso y que está correctamente instalada antes de iniciar la marcha.
Los peques viajarán seguros gracias a sus conectores rígidos FixPlus, que garantizan una instalación de la silla firme y segura. Además, la anchura y altura se ajustan de forma independiente, adaptándose al crecimiento del niño. El reposacabezas y el asiento son reclinables en 4 posiciones para un viaje más confortable.
Amenizar el viaje
Para que las vacaciones empiecen con buen pie, divertíos también durante el trayecto, especialmente si se trata de un desplazamiento de bastantes horas. Los niños se pueden cansar o aburrir fácilmente si tienen que pasar mucho rato en el coche, así que, coge su música favorita, algún juguete o libro e incluso algún audiovisual para ver mientras llegáis a vuestro destino. No te descuides el agua y algún picoteo saludable, como fruta o bocadillos. Así, durante las paradas podréis hacer un pequeño picnic.
También puedes aprovechar los descansos para visitar algún punto de interés cercano, consultándolo antes de partir o bien estando atento a las indicaciones que encontrarás en el camino. De esta manera, el trayecto no se os hará tan pesado. Y recuerda que todas estas recomendaciones, debes tenerlas en cuenta a la vuelta.
Todo lo bueno se acaba y, lamentablemente, las vacaciones también. Tras disfrutar de unos días de desconexión y relax, llegará la hora de volver a la rutina. Pero piensa en positivo, habrán sido unos días fantásticos en compañía de los tuyos, y cientos de fotos y momentos compartidos os recordarán este viaje durante mucho tiempo.
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