La pequeña Cadi se ha convertido en la protagonista de una preciosa historia que se ha hecho viral en Twitter, cuando su vecino decidió, antes de morir, comprarle regalos de Navidad para los próximos 14 años.
La niña, que tiene dos años y medio, había cautivado el corazón del anciano, quien al no tener nietos quiso convertirse en un Papá Noel de carne y hueso para la hija de sus vecinos.
Como no tenía nietos, quiso tener un detalle especial con la niña de sus vecinos
La historia ha ocurrido en el sur de Gales, y pilló de sorpresa a Owen Williams, padre de la pequeña Cadi, cuando al abrir la puerta de su casa se encontró a la hija de su vecino con un saco lleno de regalos.
El vecino, un anciano llamado Ken Watson, había fallecido recientemente a la edad de 83 años, y como no tenía nietos decidió convertirse en un Papá Noel muy especial para Cadi. Para ello, compró y envolvió regalos para los próximos 13 años, de manera que Cadi tuviera un regalo suyo hasta que cumpliera 16 años.
Su deseo, y el saco de juguetes, fue descubierto por su hija que fue la encargada de hacérselo llegar a sus vecinos ante la incredulidad de estos.
"Nuestro anciano vecino falleció recientemente. Su hija apareció hace unos momentos en nuestra casa con un gran saco de plástico. En él estaban todos los regalos de Navidad que nuestro vecino había comprado para nuestra hija para los próximos 13 años" - publicaba Owen Williams en su cuenta de Twitter.
La publicación rápidamente se viralizó, y los usuarios de Twitter se sorprendieron con la generosidad de este anciano y la preciosa idea que había tenido. Además, ayudaron a la pareja a afrontar el dilema que se les presentaba entre abrir ahora todos los regalos o hacerlo de manera progresiva, tal y como deseaba el señor Watson.
Finalmente, los padres de Cadi decidieron abrir solo el regalo correspondiente a esta Navidad y dejar el resto de paquetes para las Navidades futuras, cumpliendo así el deseo de su vecino y proporcionando regalos a su hija hasta que cumpla 16 años.
"Hemos decidido que, finalmente, vamos a abrir un regalo cada año hasta el 2032. Será nuestra manera de recordar a un caballero inmensamente generoso, nuestra nueva tradición navideña".
La historia de amistad entre esta pareja y su anciano vecino comenzó en el año 2015, cuando se mudaron al barrio. En aquel momento, Watson hizo "buenas migas" con el perrito de los Williams y desde entonces se hicieron inseparables. Luego llegó la pequeña Cadi, en julio de 2016, quien terminó de conquistar el corazón de su vecino.
Watson tuvo una vida emocionante -fue chef, activista político, buceador profesional y miembro de la Fuerza Aérea-, y un broche final que bien podría ser el argumento de una película navideña.
Vía CBC