El error tonto que cometía al poner la lavadora que estuvo a punto de costarme muy caro: 150 euros la reparación

A veces, lo más simple se convierte en una fuente de problemas si no prestamos atención a los detalles. Este fue mi caso con la lavadora. Un día, me di cuenta de que mi ropa no salía tan limpia como solía, y lo que es peor, mi lavadora hacía ruidos extraños.

Algo no iba bien. Pero, ¿qué estaba haciendo mal? Resulta que, sin darme cuenta, cometía un error que, aunque común, puede acabar costando mucho dinero: usaba demasiado detergente.

Este sencillo error, que parece inofensivo, estuvo a punto de provocar una avería grave en mi lavadora. Te cuento mi historia para que no cometas el mismo error y, de paso, ahorres un buen susto y una reparación costosa.

¿Qué pasa cuando usas demasiado detergente?

La primera señal de que algo no iba bien fue cuando abría la puerta de la lavadora y notaba un fuerte olor a detergente, más fuerte de lo habitual. Al principio pensé que era una ventaja, pero con el tiempo me di cuenta de que mis prendas no salían tan limpias como deberían.

Empezaron a quedar restos de jabón en la ropa, y algunos tejidos, sobre todo los más oscuros, lucían manchas blanquecinas. Además, notaba que el tambor de la lavadora quedaba resbaladizo y pegajoso.

Lo que no sabía entonces es que, al usar demasiado detergente, la máquina no puede enjuagarlo por completo. Ese exceso de jabón se va acumulando en el tambor, en las mangueras y en las partes internas de la lavadora, creando una capa pegajosa que atrapa restos de suciedad y residuos.

Con el tiempo, esto puede obstruir el sistema de desagüe, lo que reduce la eficiencia de la lavadora y provoca malos olores. Peor aún, este residuo acumulado puede llegar a corroer las piezas internas.

Las señales de que estás usando demasiado detergente

Si experimentas alguna de estas situaciones, es probable que estés cometiendo el mismo error que yo:

  1. Espuma excesiva: Si ves que hay demasiada espuma en el tambor durante el ciclo de lavado, es una clara señal de que estás usando más detergente del necesario. La lavadora no debería parecer una piscina de burbujas.
  2. Residuos en la ropa: Cuando la ropa sale con restos de detergente o manchas blancas, significa que la máquina no está enjuagando adecuadamente. Esto se debe al exceso de jabón.
  3. Olores desagradables: Si la lavadora desprende un olor rancio o mohoso, aunque estés usando suavizante y limpiando los filtros, podría ser que el exceso de detergente está atrapando bacterias y moho en su interior.
  4. Tiempos de lavado más largos: Cuando la máquina detecta que hay demasiado jabón, intenta compensarlo extendiendo el ciclo de enjuague. Si tus lavados tardan más de lo normal, revisa cuánto detergente estás usando.

La advertencia del técnico: una reparación costosa a la vista

Preocupada por estos síntomas, llamé a un técnico para revisar mi lavadora. Tras una inspección rápida, me dijo que estaba ante un problema común pero serio. El exceso de detergente estaba dañando el motor y el sistema de desagüe, y si seguía así, la máquina podría colapsar por completo.

¿Cuánto me costaría la reparación? Nada menos que 150 euros por cambiar el motor y limpiar las mangueras obstruidas (aquí es importante saber que el precio exacto dependerá del tipo de avería y del servicio técnico que se utilice, pero calcula entre 100 y 200 euros).

En mi caso, según el técnico, si no corregía mi error, era cuestión de tiempo para que mi lavadora quedara inutilizable. Me explicó que muchos modelos modernos utilizan sensores para optimizar el ciclo de lavado, pero cuando se usa demasiado detergente, estos sensores pueden dañarse o dar lecturas incorrectas, provocando más problemas a largo plazo.

¿Cómo evitar este error?

Lo primero que hice fue revisar las instrucciones de mi detergente. A menudo no prestamos atención a las dosis recomendadas y tendemos a pensar que más detergente significa más limpieza, echando el detergente 'a ojo'. ¡Error!

En realidad, usar la cantidad justa no solo prolonga la vida útil de la lavadora, sino que también mejora el lavado de tu ropa.

Sigue estos consejos para evitar problemas:

  1. Mide el detergente: Usa el tapón dosificador que viene con el envase o una medida exacta. Si tu lavadora es de alta eficiencia (HE), necesitarás menos detergente del que crees.
  2. No sobrecargues la lavadora: Llenar la máquina hasta el tope también dificulta el enjuague adecuado del detergente. Deja siempre un espacio libre para que la ropa se mueva.
  3. Limpia tu lavadora: Haz un ciclo de limpieza en vacío de vez en cuando, usando productos específicos para desinfectar el tambor y eliminar residuos acumulados.

En definitiva, el uso excesivo de detergente es un error que puede parecer insignificante, pero que puede tener consecuencias graves, tanto para la lavadora como para tu bolsillo.

Evitar este problema es tan sencillo como seguir las indicaciones de dosificación y prestar atención a las señales que te da la máquina. Aprende de mi experiencia y ahórrate 150 euros en una reparación innecesaria.

Foto | Portada (Montaje propio; Freepik 1, Freepik 2 y Freepik 3)

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