La infertilidad, o imposibilidad de llevar a término el embarazo, es una enfermedad que afecta tanto física como psicológicamente. Quienes la han sufrido conocen lo devastador que es desear tener un bebé y no lograrlo, y que pasen los meses, los años, y el tan deseado embarazo no llegue o se pierda una y otra vez.
Una de las historias de infertilidad más conocidas por los años de intentos y los numerosos abortos de repetición sufridos, es la de la británica Louise Warneford, quien tras 18 abortos espontáneos y 16 años de búsqueda, fue madre de un niño, William, que ahora tiene cinco años.
Louise estaba a punto de cumplir los 49 años y su marido Mark tenía 53 años cuando por fin se cumplió su sueño de tener un hijo:
"Nunca permití fotos cuando estaba embarazada porque asumí que perdería al bebé y no quería ese triste recuerdo”, dijo Warneford a TODAY Parents . "Cada pérdida me dejó devastada. Todas mis esperanzas, todos mis sueños ... todo mi mundo simplemente se derrumbaba. Nunca fue fácil".
Un embrión de donante
Estaba a punto de darse por vencida cuando conoció al Dr. Hassan Shehata, un ginecoobstetra de la clínica Medical Travel to Gynem Fertility Clinic, quien le diagnosticó un aumento de las células "asesinas naturales" o células NK (del inglés Natural Killer).
Las células NK son parte del sistema inmunológico y ayudan al cuerpo a combatir las infecciones, y según el doctor, podrían ser en algunos casos las responsables de provocar abortos espontáneos recurrentes.
La madre fue tratada con una combinación de esteroides y anticoagulantes, y a través de un embrión de donante, como habían hecho muchas veces antes, logró el embarazo y llevarlo adelante. Era la primera vez que superaba la marca de las 14 semanas de embarazo, y en junio de 2016, dio a luz a un bebé sano a las 37 semanas de gestación.
Sin embargo, señalan los expertos en reproducción que el mismo tratamiento no funciona para todas las mujeres, y que muchas siguen sufriendo abortos recurrentes sin poder encontrar una causa ni un tratamiento para evitarlos.
Un libro para compartir su historia y dar esperanzas
Louise quiso que otras personas conocieran su historia y dar esperanza a quienes estén en la búsqueda. Para ello, lanzó el año pasado el libro 'Baby Dreams', que detalla su desgarrador viaje hacia la maternidad.
Ella nunca perdió la fe y confiesa que volvería a recorrer el mismo camino por tener en brazos a su "bebé milagro", como ella lo llama.
William acaba de cumplir cinco años, y es un niño sano y feliz que vive con sus padres en Swindon, una ciudad del suroeste de Inglaterra.
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