La verdad es que no puedo evitar compartir con vosotros la admiración que he sentido al leer las declaraciones de una familia destrozada por el dolor, de una enorme entereza y generosidad.
No se si yo sería capaz de hacer esto, o me dejaría llevar por la pena y la rabia. Creo que no, que yo no sería tan generosa y sabia como lo están siendo ellos y por eso quiero compartir con vosotros la gran admiración que he sentido por ellos.
Os hablo de la familia de la madre embarazada y el bebé que fallecieron recientemente en un atropello en Madrid, estando ella a pocos días de dar a luz. Un conductor no la consiguió ver cuando cruzaba y el atropello resultó mortal para la madre inmediatamente y para el pequeño, que nació por cesárea de urgencia, pocos días después.
La noticia seguramente la conoceréis, pero lo que quiero comentaros es la generosidad en el dolor de esta familia, que ha declarado que no odian al conductor y que entienden que fue una fatalidad horrible pero que el hombre no es para ellos un criminal ni un asesino.
Os pregunto si seríais capaces de tanta entereza y generosidad si una desgracia tan terrible golpeara a vuestra familia, si perdierais a un hijo o a vuestra pareja en una situación como esta. Como padres y madres ¿podríais ser tan generosos en el dolor?
Via | ABC