Son muchos los estudios durante muchos años los que nos han venido diciendo que beber alcohol en el embarazo puede ser peligroso para el bebé, y por eso se ha recomendado siempre que si una mujer está embarazada no beba ni una gota de alcohol.
Un estudio reciente ha querido evaluar a niños de 10 años de Avon, una antigua población del suroeste de Inglaterra, para ver si había cambios entre los que fueron gestados por una madre que tomaba alcohol y los que se desarrollaron con una madre que no bebía. Lo curioso es que no los había, que podría ser seguro, y lo que hace que la recomendación no varíe es que se fijaron en el equilibrio, nada más.
Características del estudio
Bien, "nada más" queda un poco escueto. La capacidad de equilibrio está considerado un método fiable del neurodesarrollo fetal, así que evaluaron a 6.915 niños de 10 años de Avon para comprobar esa capacidad. Las madres fueron consultadas para que explicaran cuánto alcohol bebían a las 18 semanas de embarazo y después cuando el niño había cumplido ya 4 años.
La mayoría de madres (el 70%) dijo que no había consumido alcohol durante el embarazo. El 25% dijo que había tenido un consumo entre bajo (una a dos bebidas por semana) y moderado (tres a siete bebidas por semana). De éstas una de cada siete explicó que había tenido días de consumo muy elevado, tomando hasta cuatro copas de alcohol en un mismo día.
Cuando los niños tenían cuatro años, el 50% de las madres tenía un consumo moderado (3 a 7 bebidas por semana), siendo el perfil el de mujeres mayores, más ricas y con un mejor nivel educativo.
Cuando los niños tenían ya diez años evaluaron el equilibrio con tres pruebas: una que incluía caminar en una barra de equilibrio (para observar el equilibrio dinámico), otra que consistía en permanecer de pie delante del otro con los ojos abiertos y cerrados (para evaluar el equilibrio estático) y la tercera, en la que tenían que permanecer de pie en una sola pierna, con los ojos abiertos y cerrados.
Conclusiones del estudio
Los investigadores observaron que los hijos de madres que habían tomado alcohol de manera moderada no tenían peor equilibrio que aquellos cuyas madres no tomaron alcohol. Incluso se vio que obtuvieron mejores resultados en algunas pruebas. Sin embargo, se cree que estos resultados positivos podrían ser secundarios a la riqueza y la educación de las madres, es decir, al desarrollo cerebral que se produce tras nacer.
John Macleod, uno de los autores del estudio, explicó que no hay evidencia de que el uso moderado de alcohol sea bueno para los niños, pero que igualmente no parece haber evidencia firme sobre los perjuicios que podría provocar el consumo de alcohol.
Yo, por sentido común, seguiré diciendo y pensando que el alcohol durante el embarazo no puede ser bueno (además, otros estudios lo avalan). Si no me parece recomendable para nadie, sea hombre o mujer, embarazada o no, no puede parecerme adecuado para un feto que se está desarrollando. No olvidemos que la concentración de alcohol en sangre que alcance la madre será la misma que la del feto.
Por ejemplificarlo, si una mujer embarazada se toma una cerveza, su hijo también se tomará una cerveza. Como no creo que nadie en su sano juicio le dé una cerveza a un recién nacido entre toma y toma (se mete una cerveza en un biberón y se le ofrece al bebé hasta que se la acabe), no puedo pensar que puede estar bien que una mujer se la tome estando embarazada.
¿Otros estudios?
Claro, no es la primera vez que se estudian los efectos del alcohol tomado durante el embarazo en el futuro bebé. Al parecer no afecta al equilibrio, pero sí puede afectar a otras cosas. Un metaanálisis realizado en el 2010, por ejemplo, mostró que el riesgo de padecer leucemia era significativamente mayor en los niños cuyas madres bebieron.
Otro estudio realizado sobre 501 madres e hijos analizó las consecuencias a los 6 y 7 años de tomar alcohol durante el embarazo y se vio que tomar alcohol sólo una vez por semana ya afectaba a la agresividad de los niños de manera significativa.
Así que en definitiva no, no es recomendable tomar alcohol estando embarazada, porque una cosa es el equilibrio y otra muy diferente que pueda llegar a afectar a otras cosas, como la salud general o el comportamiento, o más cosas sobre las que no hemos hablado (retrasos del crecimiento, defectos congénitos, etc.).
Vía | Medline Plus, Estudio en BMJ Foto | Fotomontaje con imagen de Lunar caustic y Dave O en Flickr En Bebés y más | "Embarazadas cero alcohol", nueva web y campaña de Sanidad, El consumo de alcohol en el embarazo es la segunda causa de trastorno mental, Un consumo moderado de alcohol en el embarazo no afecta al niño, pero mejor evitarlo