No es el mismo caso que el de las guarderías públicas, de las que hablábamos hace unos días debido a la falta de plazas, lo que obliga a los padres a llevarlos a guarderías privadas con todo lo que supone.
Según el sindicato, la oferta y la demanda de plazas escolares está desequilibrada, pero la labor la tiene la Comisión de Garantías, que tendrá que organizar y asignar las plazas libres a los niños que las precisan intentando complacer las preferencias y necesidades de cada familia repartiendo las plazas que queden más cercanas a su lugar de residencia, por supuesto será complicado.
En las zonas más céntricas hay plazas en los colegios, pero la dispersión provoca que los niños tengan que hacer un trayecto de más de media hora. Poca fortuna tienen muchos de los niños y los papás o mamás de Zaragoza, que no podrán seguir la sabia recomendación de nuestra compañera Dolores, llevar a los niños caminando al colegio.
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