Enseñar natación a nuestros hijos no solamente es parte de una actividad que ellos pueden disfrutar, sino que también los hace capaces para evitar ahogamientos en caso de estar en la playa o en una piscina. Existen ciertas técnicas que incluso enseñan a los bebés a sobrevivir en el agua a través del flote, como el método ISR (Infant Swimming Resource) o de auto-rescate acuático.
Ahora, se ha vuelto viral un vídeo en el que se ve a un bebé de ocho meses ser lanzado a una piscina como método para enseñarle a nadar, causando gran controversia en redes sociales.
Publicado en TikTok por Krysta Meyer, madre del bebé en cuestión y cuyo nombre es Oliver, el vídeo es un fragmento de la clase de natación a la que asiste el pequeño, donde como se puede ver, éste es lanzado al agua por su instructora.
@mom.of.2.boyss Oliver amazes me every week! I can’t believe he is barely 2 months in and is catching on so fast. He is a little fish. ##baby ##swim
♬ original sound - mom.of.2.boyss
¡Oliver me sorprende cada semana! No puedo creer que apenas llena dos meses y está aprendiendo muy rápido. Es un pececito.
El vídeo, que rápidamente adquirió millones de vistas en TikTok, ha causado gran controversia e iniciado un debate en redes sociales debido a lo impresionante que resulta ver al bebé ser lanzado a la piscina, para después ver cómo logra flotar él solo.
En entrevista para Motherly, Krysta explica que ella entiende por qué las personas pueden asustarse por el vídeo al verlo fuera de contexto, pero piensa que lo que aparece en él es apropiado, e incluso comenta que le parece bien que cause controversia porque hace que los padres hablen de seguridad en el agua, lo que podría salvar vidas.
Es importante mencionar que la técnica de la escuela a la que asiste Oliver no es la misma que el método ISR (lo han aclarado ellos mismos en su página de Facebook). De acuerdo con ISR España, enseña a los bebés a partir de los seis meses a aguantar la respiración debajo del agua, virarse y flotar.
Además, desde el sitio web oficial del método ISR se aclara en muchas ocasiones que este método nunca lanza a los bebés al agua y el instructor está siempre dentro de la piscina con ellos.
Qué dicen los profesionales sobre esto
La Asociación Española de Pediatría (AEP) recomienda que los niños aprendan a nadar a partir de los cuatro años, aunque comenta que algunos estudios afirman que iniciar las clases entre los 1 y 4 años disminuye el número de ahogamientos.
Añade que: "Los padres deben saber que impartir clases de natación a los niños pequeños o a aquellos que no hayan adquirido suficientes habilidades no evita los ahogamientos, ni proporciona una protección completa, por lo cual es necesario mantener una supervisión continua."
Por su parte, un pediatra representante de la Academia Americana de Pediatría (AAP) declaró hace un tiempo que los pediatras no recomiendan métodos de lanzar a los bebés al agua como el del vídeo, ya que existe un riesgo significativo de que el agua entre a los pulmones si el bebé no aguanta la respiración lo suficiente o en el tiempo correcto, lo que podría llevar a una falta de oxígeno en el cerebro, neumonía o ahogamiento.
Tanto la AEP como la AAP apoyan iniciar las lecciones de natación de los niños desde temprana edad para prevenir ahogamientos, lo mejor es siempre mantener una supervisión constante cuando los niños estén cerca del agua.
Vía | Motherly
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