Muchos son los mitos que giran alrededor de un nacimiento en pleno vuelo, un acontecimiento que llama la atención, en primera instancia porque no se recomienda coger un avión cuando se superan las 32 semanas de embarazo, y segundo, porque cuesta imaginar el vértigo que debe suponer dar a luz a 10.000 metros (aproximadamente) de la tierra.
Sin embargo, la pregunta más frecuente suele ser cuál es la nacionalidad que tiene un bebé que nace durante un vuelo, una cuestión realmente compleja de resolver, ya que depende de todos los actores implicados en el acontecimiento: el país de origen de los padres, el país al que pertenece la aerolínea (a nivel legal estas se denominan "territorio ficticio", y sus leyes se rigen de acuerdo al país de su titularidad), el espacio aéreo en donde tenga lugar el nacimiento y el país de destino del vuelo en cuestión.
Aunque cada caso se puede analizar de forma particular, hay dos tipos de leyes bajo las cuales se enmarca prácticamente toda la legislación a nivel mundial: el derecho de suelo y el derecho de sangre.
Derecho de sangre: eres del país en donde han nacido tus padres
Ius sanguinis (del latín, ‘derecho de sangre’) es el criterio jurídico que puede adoptar un ordenamiento para la concesión de la nacionalidad. Según esta, una persona adquiere la nacionalidad de sus ascendientes por el simple hecho de su filiación (biológica o incluso adoptiva), aunque el lugar de nacimiento sea otro país. Aunque la gran mayoría de países se rigen bajo este precepto, un claro ejemplo de este caso es España, cuyas leyes conceden el derecho de nacionalidad a todos los hijos de españoles de forma automática.
Derecho de suelo: tu nacionalidad depende del país en donde naces
El "derecho de suelo" es una expresión jurídica que significa 'derecho del lugar'), en virtud de la cual, una persona obtiene la nacionalidad de un país de forma automática por el mero hecho de nacer en su territorio. Este criterio puede ser contrario y contradictorio con el ius sanguinis (en latín, cuya traducción es 'derecho de la sangre'), y que en la práctica es la nacionalidad de los familiares, ya sea del padre o la madre. Los ejemplos más representativos de este tipo de legislación son Estados Unidos o Canadá.
¿Qué pasa si el bebé nace durante el vuelo?
Si un bebé nace durante un vuelo, primará el derecho de sangre (es decir, que mantendrá la nacionalidad de sus padres). En caso de que nazca en el espacio aéreo de países que contemplen en su constitución el derecho de suelo, el bebé tendrá derecho a tener dos nacionalidades, a menos de que los padres decidan renunciar a alguna de ellas o que su país de origen no contemple la figura de "doble nacionalidad".
Obviamente también pueden presentarse particularidades, como que la madre sea una refugiada sin estatus legal en otro país, caso que debe resolverse de forma individual con la ayuda de un abogado especializado.