La Conserjería de Salud de la Generalitat ha informado que Cataluña incluirá la vacunación contra el virus del papiloma humano en niños de 11 a 12 años a partir del próximo curso escolar 2022-2023. Se convierte así en la primera comunidad autónoma que vacunará a los varones.
Las niñas de esa edad ya estaban incluidas en el calendario de vacunación pero no así los niños, que también son transmisores del virus, por lo que la medida pretende garantizar la protección frente a la infección del VPH tanto en niños como en niñas, y proporcionar una mayor equidad entre ambos sexos.
En Cataluña, el porcentaje de chicas que se vacunaron durante el pasado curso 2020-21 fue del 86%. Con esta nueva medida, Cataluña entra a formar parte del grupo de países que ya contaban con esta pauta de vacunación mixta como Austria, Alemania, Bélgica, Croacia, Francia, Irlanda, Israel, Italia, Liechtenstein, Noruega, Reino Unido, República Checa, Serbia, Suecia y Suiza.
Virus del papiloma humano
La vacunación frente al virus del papiloma humano (VPH) en adolescentes está incluida en los calendarios oficiales de todos los países europeos, pero algunos han decidido también administrársela a los niños, ya que tanto hombres como mujeres son transmisores de este virus.
Se calcula que más de la mitad de las personas sexualmente activas contraen este virus en algún momento de su vida, aunque en la mayoría de los casos la infección se vence sin problemas. Pero si el virus persiste en el organismo durante muchos años o si pertenece a determinados tipos, podría provocar la aparición de tumores malignos.
En las mujeres, el virus está relacionado en la mayoría de los casos con cáncer de cuello de útero, mientras que en los hombres se asocia a tumores de pene, ano y orofaríngeos. En ambos sexos, el virus puede provocar verrugas genitales, una afección benigna pero molesta y frecuente.
La vacuna resulta especialmente eficaz cuando aún no se ha producido la infección, y esto sólo puede garantizarse cuando todavía no se han iniciado relaciones sexuales. De ahí la importancia de vacunar a los preadolescentes y adolescentes, tanto niñas como niños.