Ninguno de nosotros nos echamos las manos a la cabeza si alguien afirma que los padres sufren estrés. También experimentamos en nosotros mismos cómo el teletrabajo, la educación a distancia de nuestros hijos y las convivencia las 24 horas del día ha aumentado ese estrés.
Lo que quizás no todos sabemos es que a quién más está afectando este confinamiento es a las madres. Así lo demuestra una nueva investigación de la Universitat de València que revela datos interesantes sobre la conciliación familiar durante el estado de alarma: el seguimiento escolar de los hijos lo hacen sobre todo las madres y en algunos casos las mujeres están teniendo que facilitar el teletrabajo a sus parejas.
Cómo compaginar familia y trabajo, desde casa
He sido autónoma la mayor parte de mi vida, por lo que sé lo que significa trabajar en casa mientras cuidas a tus hijos. Y más cuando, como en mi caso, esa carga no ha sido repartida porque durante años he sido la única adulta en casa.
Lo que no quiero imagionarme es cómo hubiera sido esa conciliación de haber tenido a los niños las 24 horas en casa y además tener que ayudarles con sus estudios a diario de forma telemática. Por eso, para mí, los padres y madres que están pasando el confinamiento en solitario con hijos pequeños, me parecen auténticos héroes.
Así que me ha resultado muy interesante la iniciativa de Teresa Empar Aguado y Cristina Benlloch, profesoras del Departamento de Sociología y Antropología Social de la Universitat de València, y la politóloga-jurista Anna Aguado para desvelar las alteraciones que el confinamiento está produciendo en la vida cotidiana de la población.
Las conclusiones provisionales, publicadas en la plataforma de divulgación científica 'The Conversation' revelan la mayor carga de estrés que las mujeres con niños están sufriendo estos últimos meses.
En particular, analizan la administración de los tiempos en casa y las dificultades que afrontan las madre que tienen que compaginar las cargas familiares con su jornada laboral a través del teletrabajo. Algo necesario tal y como señala Empar Aguado:
“Muchas están trabajando a la vez que están cuidando, y algunas sienten que están todo el día trabajando. A menudo, tener flexibilidad de horarios se convierte en una demostración continua y un ejercicio de responsabilidad con sus superiores”.
Con entrevistas telefónicas en profundidad y una encuesta en línea de participación voluntaria, los resultados muestran que:
- El seguimiento escolar de los niños es tarea mayoritariamente de las madres. Esto se ha convertido en un elemento de ansiedad y estrés añadido al hecho de teletrabajar, porque tal y como explica Cristina Benlloch:
“Es habitual por parte de las madres teletrabajar durante la madrugada, bien sea retrasando el momento de ir a la cama o levantándose antes que el resto de miembros de la familia”.
Restar horas de sueño permite a las madres atender su trabajo con suficiente dedicación, atender el día a día de la casa y organizar y gestionar la jornada educativa de hijos e hijas confinados en edad escolar.
Las encuestadas también han reconocido que además de teletrabajar y encargarse la mayor parte del tiempo del cuidado de los menores, ?en algunos casos deben de intentar facilitar que sus parejas trabajen o teletrabajen?, si el horario laboral de la pareja es rígido.
Pero el confinamiento nos ha afectado a todos, a la vista de los resultados provisionales: en algunas parejas hay una mayor disposición por parte de los hombres a hacer tareas domésticas que no solían realizar antes, como poner lavadoras, cocinar, ir a la compra o compartir horas de juego con los niños.
Las pantallas digitales en manos de niños pequeños se están convirtiendo en un recurso facilitador de la jornada laboral.
La finalidad de este estudio es, según remarca Anna Aguado Roselló:
"Observar cómo desde las unidades familiares se está abordando la ‘re-conciliación’ en un momento en el cual el hogar condensa todos los espacios sociales de producción y reproducción, comprender los efectos que pueda tener esta crisis sobre la conciliación entre las mujeres que se encuentran teletrabajando".
Conocer la situación puede llevar a mejorarla en caso de que volvamos atener que vivir confinados y teletrabajando, algo que esperamos que no suceda. Pero de ser así, podemos tener las herramientas para evitar situaciones tan estresantes como las que ahora detallan las encuestadas. Pero esta es mi humilde opinión.
Si te interesa la iniciativa, aún estás a tiempo de participar en el estudio, respondiendo a la encuesta aquí. Es anónima y no lleva más de cinco minutos.
Fotos | iStock
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