Los niños tienen un instinto innato para aprender cosas nuevas, y hacerlo a través del juego, estimulando su curiosidad, no sólo es divertido para ellos sino que les sirve para experimentar e interactuar de forma activa con el mundo que les rodea.
El aprendizaje Montessori fomenta la capacidad natural que tienen los niños de aprender a través del juego, así que hoy os proponemos 11 actividades de inspiración Montessori para hacer con los peques durante las vacaciones de verano.
Actividades relacionadas con la naturaleza
El contacto con la naturaleza es uno de los pilares de la metodología Montessori, pues brinda a los niños todo un mundo por descubrir y un gran campo de juegos para aprender.
El medio natural es el entorno donde los niños descubren y exploran libremente sin necesidad de nada más; es algo que no puede ser sustituido por la tecnología. Observan el ritmo de la naturaleza y aprenden a ser responsables con el entorno.
En este sentido, las plantas se convierten en grandes aliadas para el aprendizaje del niño, pues además de resultar muy sencillo cultivarlas tanto dentro como fuera de casa, favorece el desarrollo de importantes destrezas y les enseña a cuidar del medio ambiente.
Klara Moncho, de Creciendo con Montessori, nos comparte en su blog una serie de actividades con plantas para hacer con los niños y todos los beneficios que les aporta:
1. Plantar semillas o trasplantar plantas
Manipular tierra fomenta la psicomotricidad fina y estimula los sentidos. Además, plantar semillas y trasplantar plantas de una maceta a otra también ayuda a los niños a comprender las necesidades de las plantas y su ciclo de vida natural.
2. Actividades de jardinería
Antes de que los niños lleven a cabo cualquier actividad de jardinería, la experta en Montessorio recomienda preparar bandejas de Vida Práctica para facilitar sus tareas.
Por ejemplo:
- Para limpiar las hojas de las plantas debemos disponer en una bandeja un recipiente con agua, unos algodones y una esponja.
- Para cortar hojas y flores secas deberán utilizar unas tijeras y un cubo donde arrojar lo que vayan cortando.
- Para saber qué plantas necesitan ser regadas debemos enseñar al niño a tocar la tierra y detectar cuando está seca o cuando húmeda. También es importante enseñarle que hay plantas que necesitan ser regadas con más frecuencia que otras, y que incluso las hay que apenas necesitan agua.
- Pulverizar las plantas que necesitan un mayor grado de humedad con ayuda de un pulverizador.
Además de fomentar la autonomía y el sentido de la responsabilidad, todas estas actividades de jardinería ayudan a desarrollar la motricidad fina, la coordinación ojo-mano y la pinza. Igualmente, los niños deberán aprender a controlar la fuerza de sus dedos cuando manipulan las plantas, dándose cuenta enseguida de su fragilidad y la importancia de tratarlas con delicadeza.
3. Hacer arreglos florales
Otra actividad que nos propone Klara si tenemos plantas con flores es recolectarlas y hacer arreglos florales. Para ello hemos de preparar una bandeja con un jarrón, una jarra con agua, un embudo para poder llenar el jarrón, unas tijeras y un pequeño trapo o esponja para limpiar los derrames.
Actividades para practicar geografía
Stephanie, del blog Imagine our Life, nos propone una maravillosa actividad para que los niños aprendan Geografía e Historia a través de un mapa mundi elaborado en fieltro (aquí podéis descargar los patrones para dibujar vuestro mapa), que podemos colgar en la pared o bien colocar sobre una mesa.
Crearemos también una serie de tarjetas manipulativas en las que anotaremos datos como el nombre de los continentes, los animales típicos de cada continente, los principales monumentos de un país, accidentes geográficos importantes...
En la parte trasera de cada tarjeta debemos colocar un trozo de velcro que permitirá a los niños pegarlas/despegarlas fácilmente en el mapa.
Actividades de lectoescritura
Hay varias actividades Montessori relacionadas con la lectoescritura que podemos hacer con los niños desde que son muy pequeños. Son actividades manipulativas, que ayudan a los peques a desarrollar las destrezas manuales necesarias para comenzar a escribir.
Desde Creciendo con Montessori nos comparten esta actividad para hacer tanto en una pizarra negra con tiza (estimulando así los sentidos del niño), como con letras de lija:
Actividades matemáticas
Es posible enseñar matemáticas a los niños de forma divertida, manipulativa y experimental. Desde Creciendo con Montessori nos comparten esta maravillosa actividad realizada con barras de perlas, uno de los materiales Montessori más típicos del área de matemáticas.
Las barras de perlas consisten en unas barritas de alambre en las que insertamos cuentas o perlas de colores; tantas, como unidades queramos que tenga esa barra.
Con este tipo de material los niños aprenderán desde actividades básicas, como el conteo o la relación cantidad-número, hasta operaciones matemáticas más complejas.
Por su parte, la cuenta educativa @ideas_escarchadas -que ofrece experimentos, actividades y manualidades para niños de entre tres y cinco años-, nos propone estas actividades manipulativas de inspiración Montessori para aprender el conteo, los números y operaciones matemáticas sencillas.
Actividades sensoriales
Las actividades sensoriales son una excelente fuente de aprendizaje para los niños, con las que no solo se despiertan sus sentidos, sino que trabajan diferentes destrezas, aprenden nuevos conceptos y favorecen su curiosidad y experimentación.
Una de las actividades sensoriales del método Montessori son los trasvases de agua. En Creciendo con Montessori nos proponen esta actividad tan fabulosa y educativa, para la que tan solo vamos a necesitar unos barreños llenos de agua y diferentes herramientas para hacer trasvases de un barreño a otro.
Los trasvases de agua permiten a los niños aprender conceptos importantes como la capacidad y los volúmenes, además de favorecer la concentración, la atención y la coordinación óculo-manual.
Y seguimos trabajando con el agua con esta sencilla actividad sensorial que nos comparte @montessori__tommy, y que está especialmente pensada para bebés y niños de corta edad.
Consiste tan solo en llenar de agua un barreño y meter dentro esponjas de colores para que el niño pueda manipularlas libremente. Sumergiéndolas, escurriéndolas, retorciéndolas... estará trabajando la psicomotricidad fina, la coordinación óculo-manual y fortaleciendo los músculos de sus manitas.
Además, el contacto contino con el agua y la variedad de colores de las esponjas también estimulará sus sentidos.
Y terminamos nuestras recomendaciones de actividades sensoriales con esta otra propuesta de @montessori__tommy para hacer una botella sensorial.
Para su fabricación vamos a utilizar una botella de plástico vacía que llenaremos con pompones de colores, limpia pipas, purpurina de colores, aceite para bebés, gel o pegamento transparente para disminuir la velocidad de los objetos dentro. Después, sellaremos el tapón con silicona líquida para asegurarnos de que no se abre y se derrama el contenido.
Además de estimular el sentido de la vista cuando la botella se agita y los elementos se mueven en su interior, podemos utilizar la botella sensorial para hacerla rodar por el suelo y favorecer el gateo del bebé, para favorecer la concentración y para ayudar a los niños a regular sus emociones.
Deseamos que os hayan gustado estas actividades de inspiración Montessori que os hemos compartido. Estamos seguros de que los peques disfrutarán mucho haciéndolas, al tiempo que aprenden de una forma lúdica, libre y experimental.